El secretario de Organización del PSOE, José Blanco, negó hoy que el partido vaya a convocar un Congreso extraordinario tras la dimisión de Fernando Puras, y aseguró que la decisión de la Ejecutiva Federal de abstenerse en la votación de investidura de Miguel Sanz (UPN) es "de obligado cumplimiento".

Blanco, en declaraciones a la cadena Ser recogidas por EFE, afirmó que la posibilidad de convocar un Congreso extraordinario en el seno del PSN sólo "surgiría si dimitiera la dirección de la Ejecutiva regional y no es el caso".

En cuanto a la decisión del líder del PSN, Fernando Puras, de renunciar a su acta de diputado en el parlamento Foral después de que el PSOE rechazara un pacto de gobierno con Na-Bai, explicó que el candidato socialista "ha asumido su responsabilidad y eso le honra".

Ante la posibilidad de que se produzcan más dimisiones en el seno del PSN, declaró que "cuando uno forma parte de un partido político de ámbito nacional" tiene que ser "respetuoso" con las decisiones de la dirección general, al tiempo que subrayó que éstas son "de obligado cumplimiento para todo el mundo".

Asimismo, Blanco indicó que su partido "no va a consentir críticas a la dirección de los socialistas navarros" y añadió que la postura adoptada por el PSOE es "generosa", por lo que espera que "sea comprendida por los ciudadanos" de la Comunidad Foral.

En este sentido, afirmó que se va a "esforzar" en explicar la decisión del PSOE de permitir un gobierno en minoría de UPN, aunque añadió que "hay que comprender a los compañeros del partido" que han intentado un gobierno de cambio "después de las agresiones injustificadas" que los socialistas navarros "han sufrido durante tanto tiempo".

El dirigente socialista, negó además que "se haya sacrificado" Navarra, como apunta el sector crítico del PSN e insistió en que "no se puede compartir gobierno a cualquier precio".