Ante la estrategia que puede estar ideando el PSC para el debate de los presupuestos, el presidente del Congreso, José Bono, no dudó en advertir a todos los parlamentarios socialistas, y también a los catalanes, que en la obtención del escaño "ha pesado más" el valor político de José Luis Rodríguez Zapatero que el de "todos los líderes regionales juntos". "¿Quién lo duda?", se preguntó en declaraciones a Europa Press.

No obstante, Bono entiende al president, José Montilla. En una entrevista al semanario Tiempo, aseguró que los presidentes autonómicos "tienen la obligación de luchar por mejorar la financiación para los servicios que prestan" y recordó que Manuel Chaves, Juan Carlos Rodríguez Ibarra y él mismo votaron contra el modelo financiero de Felipe González. "Y nadie dudó de nuestra lealtad al partido", apostilló el presidente de la Cámara baja.

Desde Andalucía y Extremadura, mientras tanto, volvieron a repetirse los avisos a Cataluña. El vicepresidente de la Junta andaluza, Gaspar Zarrías, advirtió a la Generalitat: "Si sigue estirando la cuerda, no sé si se va a romper; pero si se rompe, será por el lado más débil", en referencia a que las tesis catalanas están en franca minoría en el debate de la financiación. Y el líder del PP extremeño, Carlos Floriano, replicó que "la pobreza en Cataluña es consecuencia de los años de Gobierno nacionalista".