Los Reyes, acompañados por los Príncipes de Asturias, presidieron el acto central del Día de las Fuerzas Armadas, celebración en la que se hizo especial homenaje al mar y a sus gentes y que decenas de miles de ciudadanos aplaudieron en A Coruña.

Las Fuerzas Armadas son siempre "bien recibidas" y sólo producen temor "a los terroristas y a los enemigos de la paz". En estos términos se expresó ayer el ministro de Defensa, José Bono, en una conversación informal con los periodistas durante la recepción que los Reyes ofrecieron en el Palacio Municipal de María Pita. El ministro matizó, no obstante, que se preocuparía "si los delincuentes no sintieran temor ante las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y ante las Fuerzas Armadas".

Bono no tiene queja de la respuesta de los coruñeses ante los actos oficiales celebrados ayer, a los que acudieron entre 60.000 y 70.000 personas, según fuentes oficiales. Para muestra, un botón: "De los 60 balcones que dan a la plaza de María Pita (donde se encuentra el ayuntamiento), 59 lucen banderas españolas", dijo con orgullo el ministro. Y es que Bono opina que Galicia "tiene tan clara su identidad" y tan asumida su diversidad "que no tiene complejos para sentirse española", aseguró.

AUSENCIA DEL BNG A Bono no le molestó la ausencia en los actos del BNG, la segunda fuerza política gallega, ni dio importancia a las dos manifestaciones convocadas en contra del militarismo, a las que acudió muy poca gente. "Son minoría", dijo.

El mal tiempo deslució los actos, que empezaron con más de media hora de retraso: el avión en el que iban los Reyes tuvo que desviarse a Santiago. Las maniobras marítimas y aéreas previstas se vieron reducidas y el despliegue militar, que estaba previsto que durase una hora, apenas alcanzó los 30 minutos.

Además de por los Príncipes, los Reyes estuvieron acompañados por el presidente de la Xunta, Manuel Fraga; los ministros Bono y Elena Espinosa, titular de la cartera de Agricultura y Pesca; el alcalde de A Coruña, Francisco Vázquez; el jefe del Estado Mayor de la Defensa, general Félix Sanz Roldán, y diversas autoridades civiles y militares. El Rey agradeció el "afecto y cariño" mostrado por los coruñeses, que aplaudieron y vitorearon a los monarcas en su recorrido.