La Cámara de Comerio de Barcelona (Cambra) manifestó su «apoyo y solidaridad» ayer para con los empresarios y trabajadores autónomos afectados por las protestas estos últimos días en la frontera entre España y Francia, convocadas por el Tsunami Democràtic y los CDR. Así lo expresó en un comunicado la entidad presidida por Joan Canadell, que, no obstante, sostuvo que «los perjuicios de los cortes de carreteras son claramente inferiores a los causados por la falta de inversiones en infraestructuras por parte del Estado español», al que responsabilizó de los daños económicos provocados por los boicots.
La organización empresarial señaló directamente al Ejecutivo presidido por Pedro Sánchez como responsable de los efectos económicos que puedan tener las protestas de los últimos días. La Cambra considera que las movilizaciones «no son más que la reacción -no deseada, pero legítima- a la negativa reiterada del Gobierno del Estado a negociar una solución política al conflicto innegable que vive Cataluña». Ante dicho impacto, la Cambra quiso manifestar su «preocupación», así como su «apoyo y solidaridad con todos los empresarios y autónomos», en especial aquellos dedicados al sector de la logística y el transporte.
La larga noche por la que pasaron los conductores, muchos de ellos camioneros, que quedaron atrapados en el tercer día de bloqueo de la AP-7 en Gerona por las protestas convocadas por Tsunami Democràtic, concluyó a primera hora de la mañana al irrumpir los antidisturbios de los Mossos en la vía y desalojar a los manifestantes. Contra 170 de ellos se abrieron diligencias de investigación.
EL CAOS CONTINUARÁ / El final de la protesta de Tsunami Democràtic dejó paso a las acciones de los CDR, que se felicitaron en Twitter por las pérdidas económicas generadas con el bloqueo de accesos y de mercancías procedentes de Europa, y advirtieron de que el caos seguirá: «Independencia o barbarie».
A última hora de la tarde, grupos de independentistas volvieron a cortar, por segundo día consecutivo, algunos accesos a Barcelona sin que se produjesen enfrentamientos. Hubo cortes de tráfico en la confluencia de la Gran Vía de les Corts Catalanes con la calle de Padilla, en la de la avenida Diagonal con la plaza de María Cristina, y en la avenida Meridiana a la altura de Fabra i Puig, además de la acampada en la plaza Universidad.
Fuera de Barcelona también se reproducen estas actuaciones, en concreto, la C-17 estuvo cortada al tráfico a la altura de Gurb (Barcelona), localidad donde los independentistas también cortaron la C-25. Y la C-33.
En paralelo, el teniente fiscal de la Audiencia Nacional, Miguel Ángel Carballo, pidió ayer a la Audiencia Nacional que ratifique la prisión de cinco de los siete independentistas radicales a quienes el juez Manuel García-Castellón encarceló el pasado 26 de septiembre por integración en organización terrorista, conspiración para cometer estragos y tenencia de explosivos.
