El presidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps, respondió ayer a una pregunta de los socialistas sobre las adjudicaciones de 13 licencias de televisión digital terrestre (TDT) obtenidas por José Luis Ulibarri, imputado por el juez Garzón en la trama de corrupción, mostrando desde la tribuna una foto del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, saludando al empresario. "Si quieren vamos a crear ambiente y nos montamos una fiesta", espetó a la oposición.

Tras este gesto, Camps explicó que las concesiones de TDT se habían hecho "mediante concurso público y sujetas a la legalidad", y apeló a la tarea de los 100.000 funcionarios que trabajan para la Generalitat para garantizar la transparencia de los expedientes que se tramitan. Angel Luna, portavoz del PSPV, acusó a Camps de favorecer a un "grupo de amigos que la Audiencia Nacional está poniendo en su sitio".

El presunto cerebro de la trama, Francisco Correa, y otro de los imputados tuvieron varias cuentas en la oficina de Bancaja en Miami (Florida), según confirmó ayer el presidente de esta entidad, José Luis Olivas, en la presentación de la cuenta de resultados de la caja. Olivas destacó que las cuentas fueron canceladas hace seis meses. Bancaja defendió la inocencia y el trabajo del director de la sucursal, Guillermo Martínez, también imputado.