La oposición somete este jueves a examen a la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, forzada por Unidas Podemos a comparecer ante el pleno del Congreso en sesión extraordinaria por la gestión con el 'Open Arms'. El pleno supone el reencuentro de los líderes del PP, Pablo Casado; Ciudadanos, Albert Rivera, y Unidas Podemos, Pablo Iglesias, tras el descanso de agosto y la investidura fallida de Pedro Sánchez, que no se prevé que acuda, el 25 de julio.
La sesión, que tiene lugar a la espera de que el presidente convoque a los partidos políticos para intentar de nuevo formar Gobierno, comenzará a las cuatro de la tarde. El grupo de Iglesias, que frenó la comparecencia de Sánchez por el mismo asunto, cree que la gestión de la vicepresidenta del Ejecutivo en funciones fue "tardía" y "torpe", pero, aun así, asegura que no intervendrá con intención de "masacrarla".
La comparecencia de Calvo tendrá lugar antes del inicio, el mes próximo, del período de sesiones ordinario en el Congreso y a petición también de ERC y el Grupo Mixto. La solicitud se aprobó el martes en la Diputación Permanente de la Cámara baja con los votos también del PP, Cs y PNV. Vox votó en contra junto con el PSOE.
Por parte de Unidas Podemos, será la portavoz, Noelia Vera, quien intervendrá para responder a Calvo, aunque el primer turno lo dividirá con Gerardo Pisarelo (En Comú), Antón Gómez-Reino (Galicia en Común), y Enrique Santiago (IU).
Por parte de Cs -Rivera reaparecerá tras un mes de agosto sin ninguna intervención pública-, tomará la palabra la portavoz, Inés Arrimadas.
"NORMALIDAD Y NATURALIDAD"
Calvo asume con "normalidad y naturalidad" esta comparecencia sobre la gestión que hizo el Ejecutivo de la crisis en Lampedusa con el buque humanitario 'Open Arms' ya que, según ha dicho, en 14 meses se ha hecho "mucho y bueno" en política migratoria. Sobre si considera un gesto de desconfianza, por parte de Unidas Podemos, la petición de comparecencia, ha subrayado que "en política valen los hechos" y "las formalidades".
"Comparezco en nombre del Gobierno y de los ministerios a los que concierne una política coordinada en seguridad y protección de los derechos humanos en nuestras fronteras y no tenemos problema", ha insistido.
