Jornada de golpes bajos en la España de la crispación. Josep Lluís Carod-Rovira sentenció que "en el PSOE están acojonados" ante el "acoso mediático" del PP. Con su afirmación, el líder de ERC puso en marcha una cadena.

Carod-Rovira afirmó a sus socios parlamentarios del PSOE que "están asustados al ver cómo 26 años después del Estatuto y 28 años después de haber recuperado la democracia el anticatalanismo es uno de los ingredientes de la política española", y por eso concluyó que los socialistas no se atreven a salirse de ese terreno. Por si no era suficiente, recordó, primero, que ERC tiene el doble de votos que Juan Carlos Rodríguez Ibarra en Extremadura, y después se reafirmó en su decisión de entrevistarse con ETA. Para terminar, el líder de Esquerra le reservó un golpe a CiU, que "dedica la mayor parte de sus energías no a criticar a la ultraderecha española, que es el PP, sino al nacionalismo de izquierdas".

Eduardo Zaplana (PP) no tuvo que esforzarse en sus ataques. Se limitó a dar la razón a Carod-Rovira y a decirle al PSOE que está como está "por su mala cabeza".