El debate de Política General celebrado hoy en Les Corts Valencianes ha estado marcado por las acusaciones de corrupción por el caso Gürtel lanzadas al Gobierno de Francisco Camps por la oposición, de las que el presidente de la Generalitat se ha defendido tras anunciar una rebaja fiscal para las familias.

En su discurso institucional sobre el estado de la Comunitat Valenciana, Camps ha eludido referirse a este asunto y no ha sido hasta el turno de réplicas al portavoz socialista, Ángel Luna, cuando se ha referido al caso Gürtel para remarcar que tiene la conciencia "muy tranquila" porque cumple "la ley".

Luna señaló que el escándalo de Gürtel ha provocado el "colapso político e institucional" de la Generalitat, que ha "eliminado" el sistema de fiscalización pública para que los ciudadanos "no sepan lo que está pasando" y llama "traidores y rastreros" a los que disienten. La trama, en su opinión, ha generado una situación "políticamente insostenible" tras haber quedado "demostrado" que "no eran sólo tres trajes", sino un "fenómeno de corrupción generalizada" en el Gobierno valenciano que "no puede quedar sin respuesta".

Camps, según Luna, es el "máximo responsable de esta situación", porque autorizó la contratación de Orange Market "en todas las Consellerias" y porque "mintió en sede parlamentaria" al negar que conocía al director de esta empresa, Álvaro Pérez, y asegurar que no existía irregularidad alguna.