El Gobierno catalán acordó ayer solicitar al pleno del Tribunal Constitucional el cese de su presidente, Manuel Jiménez de Parga, y, al mismo tiempo, emprender una demanda contra él ante la jurisdicción ordinaria. Asimismo, el Ejecutivo que preside Jordi Pujol decidió solicitar la recusación de Jiménez de Parga en todos aquellos procedimientos que se siguen en el Tribunal Constitucional en los que la Generalitat esté implicada.

Estas medidas se producen después de que Jiménez de Parga cuestionara la existencia de las autonomías históricas. El Gobierno vasco, por su parte, exigió al Constitucional que antes de pronunciarse sobre la ley de partidos resuelva la recusación que presentó contra Jiménez de Parga.