"Veo con satisfacción y admiración el efecto positivo de las medidas adoptadas y el incremento de la confianza" que han producido. Con este respaldo tan explícito al ajuste económico aprobado por el Gobierno español recibió ayer el primer ministro chino, Wen Jiabao, a José Luis Rodríguez Zapatero en Pekín. Ya no solo son los principales líderes europeos los que apoyan el golpe de timón del líder socialista. También lo hace la segunda potencia económica del mundo.

Es la tercera visita que Rodríguez Zapatero realiza a China desde que accedió a la Moncloa. Jiabao recordó ayer ante las cámaras que grababan el inicio del encuentro que cuando estalló la crisis de confianza en la Unión Europea y los mercados se lanzaron a por el euro, el primero al que llamó fue el presidente del Gobierno español. Ambos dirigentes aseguraron también que el mejor amigo de China en Europa es España.

En un terreno más práctico, Jiabao se comprometió a fomentar las exportaciones e inversiones de España en China mientras que Zapatero se ha ofrecido a mediar con la Unión Europea para que se flexibilice la política comunitaria de visados, uno de los grandes asuntos pendientes de China con Europa.