El presidente francés, Jacques Chirac, llamó ayer a los ciudadanos españoles a apoyar la Constitución europea en el referendo que se celebrará en España el 20 de febrero próximo. El presidente francés aceptó la invitación de José Luis Rodríguez Zapatero de participar el 11 de ese mes en un acto en Barcelona junto al canciller alemán, Gerhard Schröder, en respaldo de la Carta Magna.

Destacó Chirac que la consulta española tendrá mucha importancia para el futuro de la UE por ser la primera que se celebre dentro del proceso de ratificación de la Euroconstitución.

RESPUESTA A RAJOY Zapatero, por su parte, dijo que el Gobierno tiene la "mejor disposición" de compartir actos e iniciativas con las fuerzas políticas que lo deseen, en respuesta a las acusaciones del PP de que el Ejecutivo ha iniciado la campaña de la Carta europea sin contar con el primer partido de la oposición. "Cada fuerza tiene su responsabilidad ante sus electores y su proyecto político", advirtió el presidente, que, pese a la polémica, expresó su confianza en que el líder popular, Mariano Rajoy, cumplirá su compromiso de apoyar la Constitución.

Si en este asunto hubo plena afinidad entre París y Madrid, no sucedió lo mismo en el terreno de la próxima negociación de los fondos comunitarios para el periodo 2007-2013. En una actitud de calculada imparcialidad, Chirac dijo comprender la posición de Alemania, que quiere recortar las ayudas, y la de España, que pretende que los recortes se produzcan de una manera progresiva para no perder de golpe las aportaciones que recibe de Bruselas desde su incorporación a la Unión Europea y que representan cerca de 6.000 millones de euros anuales.

LAS AYUDAS DE FRANCIA Chirac dijo que Francia también tiene reivindicaciones en este campo, pues no quiere perder las multimillonarias ayudas a la agricultura que hoy percibe.

El presidente francés afirmó que, en lo tocante a la negociación financiera, sólo caben dos "hipótesis": pelear o comprenderse. "La pelea lleva al fracaso. Comprenderse conduce al acuerdo", dijo Chirac. Y añadió a renglón seguido que existe "voluntad política" para salir del atolladero, sugiriendo que la llegada de Rodríguez Zapatero al poder va a facilitar las negociaciones entre las diferentes partes.