Centenares de personas han pasado la noche en el aeropuerto de Barcelona, que se convirtió este lunes en el epicentro de las protestas independentistas contra la sentencia del 'procés', lo que obligó a cancelar más de un centenar de vuelos.

El Prat ha amanecido este martes con centenares de personas durmiendo en sillas o en el suelo de la terminal, en donde se han abierto varias salas destinadas a los trabajadores para que los pasajeros puedan descansar. Aena ha informado este martes de que se han cancelado 45 de los 986 vuelos programados, porque los aviones no pudieron llegar a El Prat como consecuencia de las protestas.

En el aeropuerto también se pueden ver multitud de colas, tanto en los mostradores de facturación, como en los de reclamaciones, donde igualmente hay gente durmiendo, especialmente en el de Vueling, que el lunes canceló un centenar de vuelos al ser la principal aerolínea que opera en el aeropuerto.

A los centenares de personas que ayer perdieron su vuelo se han sumado los viajeros que, tras conocer la situación de ayer, han preferido llegar al aeropuerto con mucha antelación.

A diferencia de ayer lunes, la presencia policial en el recinto es la misma que cualquier otro día y se puede acceder a su interior sin necesidad de enseñar la tarjeta de embarque, ni pasar controles policiales.

Durante esta noche los pasajeros han podido llegar a El Prat con normalidad, después del bloqueo que vivió esta infraestructura por las protestas de independentistas y los enfrentamientos entre policías y manifestantes que colapsaron el recinto.

La protesta, que se saldó con unos 78 heridos, fue desconvocada antes de medianoche.