Una vez completadas las declaraciones de los 17 acusados con la más esperada, la de la infanta Cristina, el juicio del 'caso Nóos' afronta desde la semana pasada las comparecencias de testigos yperitos. Según el calendario establecido, un total de 363 personasdeclararán hasta principios de junio. Rita Barberá, Rodrigo Rato, Francisco Camps, Esteban González Pons, Alberto Ruiz-Gallardón, Carlos García Revenga y José Manuel Romero (los dos últimos, exasesores de la Casa del Rey) son los nombres más destacados.

El 30 de junio es el último día previsto para un juicio oral que ya dio para mucho en la primera fase. Más allá de los argumentos y coartadas de cada imputado, estas son algunas de las anécdotas que dejaron las declaraciones.

BILLETES DE AVIÓN

Palma es el escenario del juicio del año, pero muchos de los acusados y letrados no residen en la ciudad. Es por eso que los viajes a la Península han sido frecuentes. El viernes 26, cuando el ritmo lento de las declaraciones forzó a las magistradas a alargar la primera fase una semana más, se tuvo que cancelar la sesión de tarde. Pese a la urgencia de terminar con los interrogatorios, varios letrados anunciaron que tenían vuelos reservados y que no podrían estar presentes después de comer. La sorpresa fue generalizada en la sala cuando la acusación del Partido Socialista valenciano se retiró 15 minutos antes del final para dirigirse al aeropuerto.

LAS DISTRACCIONES DE COGHEN

Mercedes Coghen, la exconsejera delegada de la candidatura olímpica de Madrid 2016, estaba en la segunda fila del banquillo de los acusados detrás del estrado, sitio que las cámaras que retransmitían el juicio incluían en su encuadre. Por eso se podían ver sus variadas actividades para entretenerse durante las monótonas jornadas. Una pelota antiestrés, bolígrafos de colores con los que dibujaba en un cuaderno, consultas al móvil y una cadena de gomas de pelo fueron algunas de las instantáneas que dejó Coghen.

ACTITUDES MUY DIFERENTES

Las caras largas dominaban en la sala de la Escuela Balear de Administración Públicadonde se celebra el juicio. Unas más que las otras. Ante el micrófono, la mayoría de los acusados se mostraron correctos, respetuosos y serios. En un extremo, Jorge Vela fue el más atrevido. Empezó el interrogatorio seguro de sí mismo y con cierta altivez. La magistrada Samantha Romero exigió un cambio de actitud y le pidió "un tono mucho más sosegado". En el otro flanco,Ana María Tejeiro fue la que se mostró más abrumada por la situación. Con voz temblorosa y visiblemente afectada, hizo saber a la sala que solo respondería a las preguntas de su abogado porque estaba "muy nerviosa".

EL 'iTUNES' DE MANOS LIMPIAS

La testificación de Iñaki Urdangarin fue la de los problemas de sonido. En dos ocasiones se escuchó una música de fondo procedente de los ordenadores de los abogados. Virginia López Negrete, la abogada de Manos Limpias, se disculpó: "Un botón ha activado el 'iTunes' de mi ordenador". La altura del exjugador de balonmano fue otro impedimento a la hora de declarar. En múltiples ocasiones y después de ajustar el micrófono, la jueza tuvo que pedirle que alzara la voz, ya que "si no, no se escucha en la grabación".

EL ENCARCELADO

Los acusados tienen derecho a estar presentes en el resto de sesiones. Todos, excepto uno, han renunciado a hacerlo. Se trata de Miguel Ángel Bonet, exasesor jurídico del Institut Balear de Turisme. ¿El motivo? Puede estar relacionado con la pena de cárcel que actualmente cumple en la prisión de Palma por el 'caso Ibatur'. Si está en el juicio, no está entre rejas.