El PSOE sacaría sólo dos puntos de ventaja al PP si se celebraran hoy elecciones generales. El barómetro de otoño del CIS sitúa a los socialistas (39,7%) en su posición más baja desde el 14 de marzo del 2004, cuando obtuvieron un 43,7%, más de cinco puntos por encima del PP, que recibe ahora el apoyo del 37,7% del electorado, según el CIS. Un porcentaje similar al que obtuvo en las legislativas, cuando perdió con el 37,81% de los sufragios. Fuentes del Gobierno reconocieron ayer que una diferencia de dos puntos es, en la práctica, un empate técnico, aunque recordaron que no hay ningún proceso electoral en el futuro inmediato.

La calificación de los líderes también trasluce el desgaste del Ejecutivo. José Luis Rodríguez Zapatero suspende por primera vez desde que es presidente (4,86), --lejos del 6,61 de abril del 2004-- aunque continúa sacando mejor calificación que su oponente directo, Mariano Rajoy (4,10), quien también obtiene su nota más baja desde el 14-M.

UN 7% MENOS DE CONFIANZA Además de bajar en sus calificaciones, los líderes de los dos principales partidos pierden confianza de los ciudadanos respecto del último barómetro del CIS, realizado en julio. En el conocido ayer, el 38,2% declara tener "mucha" o "bastante" confianza en Zapatero, frente al 45,5% que hacía la misma afirmación tres meses antes. En la misma pregunta, un 23,5% tiene "mucha" o "bastante" confianza en Rajoy (el 25% en julio).

El Gobierno admite que los datos de esta encuesta son "preocupantes", según fuentes de la presidencia, porque muestran un "bajo estado de ánimo" de parte del electorado socialista. Pero precisan que la distancia que resta hasta unas elecciones permitirá remontar, ya que las encuestas realizadas a mitad de legislatura no reflejan tanto intención de voto como situación emocional del votante. Según este análisis, el desgaste del PSOE se debe a la "crispación" que "está provocando el PP" ante determinadas políticas del Gobierno, como la admisión del Estatuto de Cataluña en el Congreso o la ley de educación.

Las fuentes gubernamentales también muestran su inquietud por que Zapatero resulte más perjudicado que sus ministros. Y concluyen que está calando la estrategia del PP de desgastar al presidente.

En cuanto a los ministros, el titular de Defensa, José Bono, vuelve a ser el más conocido y mejor valorado del Gabinete. De hecho, sólo él y los vicepresidentes Pedro Solbes y María Teresa Fernández de la Vega superan el 5 que marca el aprobado. En el polo opuesto se sitúan las ministras de Educación y Vivienda. María Jesús San Segundo es la menos conocida del Ejecutivo (un 62,2% de los encuestados reconocen no saber quién es), y María Antonia Trujillo es la peor valorada (3,89).

SIN PREGUNTAS DEL ESTATUTO La encuesta del CIS no incluye ninguna pregunta sobre el Estatuto, a pesar de que éstas se hicieron entre el 21 y el 28 de octubre. El texto catalán llevaba ya tres semanas en el Congreso y el pleno para el debate de su admisión a trámite estaba fijado para el 2 de noviembre.

El CIS no actuó así con el plan Ibarretxe . Cuando llegó al Parlamento, incluyó dos preguntas sobre el conocimiento y la valoración del controvertido Estatuto vasco. Fue en el barómetro de enero del 2005. Fuentes del Ejecutivo explicaron ayer que el CIS esperará a preguntar por el proyecto catalán cuando la ciudadanía lo conozca mejor.