El presidente catalán, Artur Mas, ha pactado con ERC, ICV-EUiA y la CUP celebrar el 9 de noviembre del año 2014 una consulta, sin el consentimiento del Estado, que contendrá una pregunta doble, ya que se preguntará a los ciudadanos si desean convertir Cataluña en un Estado y, en caso afirmativo, si debe ser independiente.
Tras el anuncio, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, garantizó que la consulta no se celebrará porque es inconstitucional, un asunto que ve fuera de toda discusión y negociación porque "la soberanía del pueblo español no es negociable".
Rajoy hizo hincapié en que no es negociable algo que es "propiedad" de todos los españoles y "solo del conjunto de los españoles" como es la soberanía.
El presidente hizo estas declaraciones durante la rueda de prensa conjunta en el palacio de la Moncloa con el presidente del Consejo Europeo, Herman van Rompuy, quien advirtió de que una declaración de independencia de Cataluña la convertiría en un tercer Estado respecto a la UE y por lo tanto "no se le aplicarían los tratados".
El pacto de la consulta logrado ayer se produjo en una negociación relámpago, en 48 horas, que tuvo como colofón una reunión en la mañana de ayer en el Palacio de la Generalitat en la que intervinieron, además de Mas, los líderes de ERC (Oriol Junqueras y Marta Rovira), de ICV-EUiA (Joan Herrera y Joan Mena), la CUP (David Fernández y Quim Arrufat), UDC (Joana Ortega y Ramon Espadaler) y CDC (Jordi Turull y Francesc Homs).
"ERC MEDITA" Con este acuerdo, además, CiU se garantiza el apoyo de ERC a los Presupuestos de la Generalitat para el año 2014, lo que se había puesto en duda por algunos dirigentes republicanos, que sin embargo ahora meditan si entran definitivamente en el Gobierno catalán.
El pacto resultante, avalado desde Madrid por el líder de UDC, Josep Antoni Duran Lleida, lo leyó Mas en una rueda de prensa en la que a él no se le pudo hacer preguntas --al resto de líderes sí-- y que incluye una primera pregunta: "¿Quiere que Cataluña se convierta en un Estado?". En "caso afirmativo" habría la opción de responder a una subpregunta que interrogaría a los catalanes sobre si quieren que "este Estado sea independiente".
Mas cree que la pregunta pactada es "inclusiva" y "muy mayoritaria", a la vez que destacó que en solo dos días de negociación "discreta" se logró pactar la pregunta, la fecha del 9 de noviembre --día de La Almudena-- y el procedimiento que se utilizará para pedirla, que abordará el Parlamento de Cataluña la próxima semana.
El presidente de ERC, Oriol Junqueras, afirmó por su parte que, aunque "la doble pregunta encadenada" no es lo que quería su partido, porque hubiese preferido una sola pregunta corta y sobre la independencia, la había aceptado para conseguir que el acuerdo "sea muy mayoritario".
Por su parte, el líder de ICV-
EUiA, Joan Herrera, consideró que la doble pregunta asegurará una "inmensa mayoría para cambiar las relaciones con el Estado", e inventó al PSC a sumarse porque "no tiene ningún argumento para no estar en el acuerdo".
La CUP acepta "la doble pregunta encadenada" porque "incluye la palabra independencia", aunque critica que falta claridad de la misma.
