El juicio por la catástrofe del 'Prestige' se reanudará el próximo 13 de febrero, en el recinto ferial ExpoCoruña, con la declaración de los peritos, después de que hayan concluido las declaraciones de los testigos aportados por algunas de las partes personadas para acreditar los daños por las responsabilidades civiles que se reclaman.

Después de varios días declarando trabajadores de empresas depuradoras y comercializadoras de marisco, la vista ha continuado este jueves con el testimonio, entre otros, de un inspector de la entonces Consejería de Pesca que ratificó el contenido de las actas que elaboró en su día sobre el estado de los buques que participaron en las labores de limpieza y que llegaban "sucios de chapapote", ha apuntado.

La vista apenas ha durado una hora, porque únicamente se limitó a que los representantes de empresas o astilleros que llevaron a cabo la limpieza de los barcos ratificaran el contenido de las facturas que aportaron.

En los días anteriores, todos los testigos que han prestado declaración lo han hecho para corroborar que, tras el siniestro, las empresas comercializadoras de marisco para las que trabajaban registraron un descenso de ventas, que han atribuido al "miedo" entre los clientes a una posible contaminación del producto.

Recuperar actividad

Así lo ha hecho también una trabajadora de otra de las empresas depuradoras que reclama daños. En concreto, ha dicho que para ellos hubiera sido "un año muy bueno" sin la catástrofe del 'Prestige' y que les costó "mucho" recuperar la actividad por el temor que suscitó entre la clientela el consumo de estos productos.

Al igual que ha hecho otra de las testigos, ha indicado que "hasta el verano" de 2003 no recuperaron la actividad. "Esas navidades me dediqué a hacer redes para evitar que el chapapote llegara a las playas y no a envasar almeja", ha resumido la trabajadora de una empresa depuradora de la provincia de Pontevedra a preguntas del letrado del Fondo Internacional para la Compensación de Daños por Hidrocarburos (Fidac).