La Audiencia de Barcelona ha condenado a catorce años de prisión a un hombre que intentó asesinar a su expareja, a la que dejó malherida en una acequia en Barberà del Vallès (Barcelona), y abandonó después en unos contenedores de basura a la hija de ambos, de seis meses.

En su sentencia, la sección vigésima de la Audiencia de Barcelona condena al procesado, William Rodríguez Méndez, por un delito de intento de asesinato y otro de abandono de familia y le inhabilita para el ejercicio de la patria potestad durante el tiempo de la condena respecto a la hija a la que dejó en la basura.

El tribunal ha acordado inhabilitar al procesado para el ejercicio de la patria potestad solo en relación con la menor víctima del delito, al tener en cuenta que, hasta el momento de su perpetración, "el acusado se había comportado como un buen padre, atendiendo debidamente a sus dos hijas", incluida la que tiene con otra mujer.

El intento de asesinato ocurrió la noche del 25 al 26 de febrero de 2012, cuando el procesado acudió con su exmujer, con la que había roto hacía aproximadamente un mes y tenía una hija común, y unas amigas de esta a una discoteca de Barcelona.

Hacia las cuatro de la madrugada, el procesado acompañó en coche a casa a su expareja y, por el camino, pasaron a recoger a su hija de seis meses que habían dejado en casa de una amiga en Sabadell (Barcelona) para que cuidara de ella mientras estaban en la discoteca.

En la mitad del trayecto, la víctima sintió ganas de vomitar, por lo que el procesado paró el vehículo y en ese momento, aprovechando su situación de "indisposición, desvalimiento y debilidad" por la cantidad de alcohol que había consumido, le rodeó el cuello con una cuerda y la apretó fuertemente con la intención de acabar con su vida mientras la golpeaba en la cabeza con un objeto contundente, añade el tribunal.

Creyéndola muerta, según la sentencia, el procesado dejó a su exmujer en una acequia próxima y, con el fin de dificultar su localización, le cubrió el cuerpo con ramas y hojas y se llevó consigo el teléfono móvil que ella llevaba.

Posteriormente, se dirigió a la calle Pirineus de Barberà del Vallès (Barcelona), donde dejó abandonada a su hija, sentada en la sillita portabebés, frente a unos contenedores de basura, "consciente de la época del año y de la posibilidad de que no fuera recogida por nadie en varias horas", añade el fallo.

La niña fue hallada hacia las 05.45 horas por tres jóvenes que pasaban por su coche en un vehículo y la llevaron a una comisaría cercana.

A la mujer la encontró malherida un mosso d'esquadra fuera de servicio que circulaba en bicicleta por la zona y escuchó sus gritos de auxilio.