El Congreso ha autorizado hoy al Gobierno, con los votos a favor del PSOE, CiU, PNV y CC y la abstención del PP, a prorrogar el estado de alarma hasta el 15 de enero para consolidar la normalidad en el tráfico aéreo y mitigar la "alarma social" que ha generado la crisis de los controladores aéreos. Se han opuesto a la medida BNG, NaBai, UPyD y ERC-IU-ICV, el único grupo que había presentado una propuesta de resolución, que ha sido rechazada por el pleno.

El ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui, ha pedido al Congreso que apoye la prórroga del estado de alarma en las torres y centros de control aéreo hasta el 15 de enero por el impacto económico que un nuevo sabotaje tendría para España. Jáuregui ha insistido en que el transporte áereo tiene un "carácter neurálgico excepcional" debido a que tres de cada cuatro turistas llegan hasta el país por este medio.

"Las consecuencias de un nuevo plante serían demoledoras para España. No solo sería un drama para las miles de personas bloqueadas en los aeropuertos (...) sino el coste riesgo para el turismo sería de miles de millones de euros", ha asegurado Jáuregui, que ha recordado que no se trató de una "huelga salvaje" sino de un "sabotaje" sin precedentes en ningún país del mundo.

Medida extraordinaria

El jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, ha asistido al debate en contra de lo previsto y ha tenido tiempo de votar la prórroga antes de abandonar el hemiciclo para acudir a Bruselas, donde participará en el Consejo Europeo de diciembre.

La portavoz del PP, Soraya Sáenz de Santamaría, ha explicado que su partido se abstenía porque el estado de alarma fue "provocado" por los controladores, pero la "prórroga la genera el Gobierno con su incompetencia". Sáenz de Santamaría ha recordado que ningún presidente del Gobierno había recurrido hasta ahora a esta medida extraordinaria incluida en la Constitución. "Es usted un presidente del Gobierno tan excepcional que ni siquiera se ha subido a la tribuna el día que pide la prórroga", le ha dicho a Zapatero.

Mariano Rajoy también está siguiendo el debate desde su escaño y no ha viajado a Bruselas. El presidente del PP anuló ayer su participación en la habitual reunión que los dirigentes europeos conservadores celebran en paralelo al Consejo Europeo.