El Tribunal Constitucional (TC) ha sentenciado que el catalán no debe ser un requisito general para convertirse en funcionario en Baleares, aunque sí constituya un mérito a puntuar, con lo que avala la reforma de la ley de función pública de Baleares acometida por el Ejecutivo de José Ramón Bauzá.

El Constitucional considera que es aceptable que solo en determinados puestos este conocimiento del catalán será no solo un mérito sino un requisito a exigir a quienes aspiren a la administración autonómica.

La sentencia, que cuenta con dos votos particulares, rechaza así un recurso presentado hace casi un año por 50 senadores socialistas a iniciativa del PSOE balear, que consideraban discriminada la lengua cooficial balear.