Por unanimidad. El Tribunal Constitucional confirmó ayer la decisión del Tribunal Supremo de expulsar del proceso electoral a 133 listas de Acción Nacionalista Vasca (ANV) y las 237 candidaturas de las agrupaciones electorales de Aberzale Sozialistak por ser sucesoras de la ilegalizada Batasuna.

A media tarde, el líder de la ilegalizada Batasuna Pernando Barrena desafió al Constitucional diciendo que "sea cual sea" su decisión sobre las listas de electores de Aberzale Sozialistak, la izquierda aberzale hará campaña y estará en los comicios por "responsabilidad política".

Las sentencias del alto tribunal se dieron a conocer unos minutos después de que arrancara la campaña electoral del 27-M.

Los jueces tardaron ocho horas en tomar una decisión. En sus sentencias asumieron los argumentos del fiscal y del Gobierno, que pidieron que esas candidaturas fueran anuladas para evitar que Batasuna estuviera presente en las elecciones.

El Tribunal Supremo actuó contra esas candidaturas para evitar un fraude de ley, ya que la fuerza ilegal apadrinó las agrupaciones electorales y "parasitó" parcialmente las listas de ANV.

El Constitucional decidió el miércoles resolver el amparo presentado por ese partido como un recurso electoral, para así garantizar "los derechos fundamentales" de las personas que han perdido sus derechos civiles de concurrir a los comicios del próximo día 27.

LAS RESOLUCIONES Antes de la medianoche, inicio de la campaña electoral, el Constitucional tenía que dictar dos resoluciones: una sobre las agrupaciones electorales de la izquierda aberzale y otra sobre las listas de ANV anuladas.

Este partido rechaza, en el recurso presentado ante el Constitucional, que forme parte del complejo Batasuna o que mantenga "relaciones orgánicas o de dependencia funcional de ETA" o que tenga "entre sus dirigentes o afiliados a personas condenadas por terrorismo". Asimismo, ANV sostiene que defiende "una clara posición respecto a la violencia". Por ello, subraya que la anulación de 133 de sus candidaturas lesiona el derecho fundamental de todo ciudadano "a participar en las elecciones".

Esos argumentos son rechazados por el fiscal y el Gobierno. La fiscalía sostiene que Batasuna ha instrumentalizado "un partido legal" como "cobertura de un partido ilegalizado". También que las personas que integran las listas anuladas pierden sus derechos porque con su presencia han posibilitado el fraude que pretendía Batasuna.

Por este motivo, el fiscal rechaza que la decisión del Supremo signifique que "cualquier partido que en el futuro acoja a candidatos" que han formado parte de la fuerza ilegal "acabará viendo cómo sus propias listas resultan también anuladas".

El ministerio público explica que esa prohibición únicamente les afectaría si "la inclusión" de esas personas "obedeciera a una operación engañosa, consistente en la ocupación por el nuevo partido del espacio que anteriormente venía disponiendo el partido ilegalizado".

COOPERACION "VOLUNTARIA" Por ello, el fiscal acusa a los candidatos de ANV de "cooperar voluntariamente con una plataforma dedicada a dar continuidad a los partidos políticos disueltos". Por tanto, no se actúa contra "una determinada ideología o un concreto pensamiento político", sino contra la decisión "libre y voluntaria" de los candidatos de ser instrumentalizados por la formación ilegal.

Las mismas tesis son defendidas por el Gobierno que explica a los magistrados del Constitucional que ANV ha sido "parasitado" por Batasuna.