El pequeño constructor Juan Antonio Salguero Sánchez, dueño de la empresa Demastir, SL explicó ayer a este diario supuestos pagos del 20% de comisión por la quincena de obras --que alcanzaron los 600.000 euros-- que efectuó en los dos últimos años para Adigsa, la empresa pública de la Generalitat encargada de la rehabilitación de viviendas. Salguero aseguró que hizo los pagos "en negro" a José María Penin, pariente lejano del entonces consejero de Política Territorial, Felip Puig. "Estoy deseando que me llame Anticorrupción", dijo Salguero, el primer empresario en admitir pagos durante la etapa de Pujol.

Fuentes de CiU dijeron que Puig no tenía relación con Penin, y que sólo es un primo muy lejano. Según su versión, una dirigente de la federación se entrevistó con Salguero, quien les amenazó con ir a la prensa si Adigsa no le pagaba 300.000 euros que le debía por rehabilitar un edificio. Las mismas fuentes agregaron que Penin era un colaborador externo de la empresa pública. J. CORACHAN