Aunque prevé mantener las ventajas económicas de los ERTEs por coronavirus aunque decaiga el estado de alarma, el Gobierno siguió ligando la continuidad de las primeras a que el Congreso apruebe este miércoles una nueva prórroga de este régimen excepcional. La portavoz del Ejecutivo y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, avisó que «muchas» de las medidas económicas aprobadas por decretos leyes decaerían de forma «automática» sin una nueva extensión quincenal.

Confirmaba así la «realidad» expresada por el ministro de Transportes, José Luis Ábalos, sobre el fin de la flexibilidad de los ERTE si no se prorroga el estado de alarma. Este ha sido un argumento utilizado con intensidad desde las filas de los socios de Gobierno para intentar que el Congreso avale la nueva extensión de la medida. Montero resaltó que el mecanismo de los ERTEs han evitado «despidos masivos» y cree que se está «estabilizando» el impacto de la pandemia en el mercado laboral.

El PP presentó este martes en el Congreso una enmienda para desvincular las medidas de apoyo al empleo a la finalización del estado de alarma. Y en el Senado tanto populares como Cs atacaron al Gobierno por este flanco. Lorena Roldán, líder naranja en Cataluña y senadora, reprochó a Pedro Sánchez que se dirija a la oposición utilizando a los afectados por los ERTE como «rehenes» y que utilice el estado de alarma a su «antojo».

El presidente español no se refirió directamente al asunto en el que sí que entró Yolanda Díaz. La ministra de Trabajo y Economía Social criticó duramente que el PP no las hubiera votado a favor y «que ahora reclaman», «Un PP que no ha votado a favor de los ERTE, ni de la exoneración de cuotas para las empresas, ni del subsidio para los trabajadores temporales ni para las empleadas del hogar», recriminó a la senadora popular Ana Isabel Alós, que había pedido que los ERTEs se prolonguen hasta septiembre y en algunos sectores hasta diciembre.

«No tendría sentido que hubiéramos desplegado esta herramienta con el enorme impacto económico que tiene para luego dejarlo caer», añadió Díaz. La ministra de comentó que «a día de hoy hay flexibilización de los ERTEs con ERTE parciales» para que el empresario pueda incorporar a sus trabajadores e incidió en que la prórroga y las nuevas condiciones de este instrumento se está negociando en la Mesa del Diálogo Social que merece «discreción y reposo».

Pese a siga agitando el espantajo de la caída de los ERTEs sin no la prórroga, el Gobierno prevé mantener las ventajas de los ERTEs aunque decaiga el estado de alarma. Así lo aseguró el secretario de Estado de Empleo y Economía Social, Joaquín Pérez Rey, quien afirmó que el «paraguas jurídico» de los ERTEs es el estado de alarma, pero si este sucumbiera el Gobierno «valoraría todas las opciones» con el objetivo de evitar un «efecto negativo» en los trabajadores.