La Corte de Apelación de Bruselas decidirá el lunes próximo sobre la extradición del etarra Ventura Tomé Quiroga, un traslado a España que negó en primera instancia la justicia belga basándose en defectos de forma de la euroorden redactada por la Audiencia Nacional española.

Los magistrados decidirán sobre el recurso interpuesto la semana pasada por la Fiscalía de Bruselas para que se ejecute el traslado de Tomé Quiroga, con dos condenas por sendos atentados del "comando Saioa" de ETA durante la década de los 80 y detenido el 28 de octubre en la capital belga.

El etarra sigue encarcelado a la espera de la resolución del recurso, señalaron a Efe fuentes del ministerio fiscal.

Según la fiscalía, el juez no motivó suficientemente su decisión, que basó en defectos de forma de la euroorden de detención dictada por la Audiencia Nacional española.

La defensa había alegado errores en ese documento, así como "falta de respeto a los derechos humanos en España", para evitar que Tomé Quiroga fuera extraditado.

Por otra parte, los jueces revisarán mañana la prisión provisional de Javier Aguirre Ibáñez, detenido en la misma operación.

Este joven de Vitoria, que había alquilado una vivienda bajo otro nombre en Bruselas donde estaba refugiado Ventura Tomé, tiene dos causas pendientes en España y sobre él también hay una euroorden de arresto.

Tomé Quiroga y Aguirre Ibáñez fueron los primeros detenidos después de que ETA anunciara el pasado 20 de octubre el cese definitivo de la violencia.

Ventura Tomé tiene pendiente en España una condena de 17 años de cárcel dictada en 2000 por la colocación de explosivos "trampa" en un paraje de Navarra en 1985 destinados a agentes de la Guardia Civil.

En su historial como miembro del "comando Saioa" fue también condenado en 1999 a 22 años de prisión por la colocación de sendos artefactos en una sucursal del Banco Central en Sangüesa (Navarra) y en un supermercado de Ejea de los Caballeros (Zaragoza) en 1983 y 1984, respectivamente.

Nacido en Pasajes (Guipúzcoa) y de 58 años, también fue juzgado y condenado en París por asociación de malhechores en 1992 y expulsado de Francia en 1996, fecha en la que fue detenido en España.