La recién nombrada ministra de Defensa, Dolores de Cospedal,ha asegurado que seguirá como secretaria general del PP tras el Congreso que el partido conservador celebrará previsiblemente en enero o febrero del 2017. Cospedal tiene intención de seguir como número 2 del partido incluso después de un Congreso que el líder popular ha retrasado más de dos años, con el argumento de que las prioridades eran otras, y que en un principio servirá para establecer las cuotas de poder cara a la sucesión, aún sin fecha, del presidente.

La nueva ministra ha confirmado que simultaneará sus tareas al frente de Defensa con las del PP en una conversación informal con un grupo de periodistas. "No os vais a librar de mí", ha bromeado con la prensa que habitualmente sigue al partido, tras tomar posesión de su cargo.

Al acto en el Ministerio de Defensa han acudido seis ministros, los presidentes del Congreso y el Senado, prácticamente toda la cúpula popular, buena parte del grupo parlamentario en el Congreso, dirigentes conservadores de Castilla La-Mancha y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes. De esta forma, el PP ha querido volcarse en la toma de posesión de la nueva ministra, que se ha estrenado en sus nuevas funciones pasando, bajo la lluvia, revista a las tropas y rindiendo honores a la bandera.

Asimismo, ha asumido su cartera con el compromiso de "trabajar por el bien general y en beneficio y por la grandeza de España" y con la "ayuda de Dios". Sus primeras palabras han sido para agradecer a Rajoy su nombramiento y mostrar su "orgullo" por el cargo.

EL RESTO DE TOMAS DE POSESIÓN

Tras jurar o prometer sus cargos ante el Rey a primera hora de la mañana y participar en una reunión "protocolaria" del Consejo de Ministros, en la que Mariano Rajoy ha transmitido a su nuevo equipo la necesidad de "dialogar" en una legislatura en minoría parlamentaria del PP, no solo Cospedal, el resto de los seis nuevos ministros prevén participar en actos similares.

Esta mañana se han celebrado ya los intercambios de carteras enFomento y Exteriores, a los que han acudido varios miembros del nuevo Ejecutivo para arropar a sus colegas. Así, el nuevo titular de Fomento, Íñigo de la Serna, arropado por la vicepresidenta Soraya Saénz de Santamaría, ha tomado posesión con mucha prudencia, sin prometer el aumento de inversiones que los representantes de las grandes constructoras presentes en el acto esperan como agua de mayo.

DE LA SERNA NO PROMETE UN AUMENTO INVERSOR

Al contrario, se ha puesto como objetivo la “eficacia y eficiencia de los recursos públicos”. Tampoco ha mencionado el diálogo con las comunidades autónomas que en casos como el de Cataluña y los problemas de Cercanías, será clave para juzgar el resultado de su gestión.

Muy dado a la hipérbole, según sus detractores del Ayuntamiento de Santander, ha dado una primera muestra de ello al afirmar que su vida política ha discurrido "en paralelo” a la de Rajoy, después de que este le catapultara en 2007 a la alcaldía, informa Manel Vilaseró.

Alfonso Dastis, por su parte, ha garantizado que tras casi un año en el que el país ha paralizado su impulso por haber estado en funciones su objetivo es "volverle a dar al botón del play y demostrar que España está de verdad de vuelta". Su antecesor en el ministerio de Exteriores, José Manuel García-Margallo, se ha despedido como ministro agradeciendo a Rajoy la confianza otorgada y destacando los logros de su gestión.