Los compromisos incluidos en el documento aprobado ayer deberán concretarse en medidas puntuales durante la cumbre bilateral con EEUU que se celebrará en marzo en Madrid. Una reunión en la que se instará a buscar nuevos mecanismos de ayuda a los países que se han convertido en vivero de terroristas. "La amenaza es tan real como internacional", dijo Napolitano, y recordó que en el vuelo de Detroit contra el que quería atentar Al Qaeda viajaban pasajeros de 17 países.