El diputado de la CUP en el Parlament Vidal Aragonés ha instado este jueves a Junts per Catalunya (JxCat) y ERC a que "recuperen la mesa de negociación" para hacer posible la investidura, y ha lanzado una advertencia: "Si alguien piensa que cuando tiene un acuerdo con la CUP se puede echar atrás, que se prepare".

"Que se prepare para una campaña en la calle de denuncia, que se prepare para no tener los cuatro votos de la CUP", ha alertado Aragonés en declaraciones a La Xarxa.

Para resaltar el peso de la CUP en el Parlament, Aragonés ha señalado que "no son cuatro diputados, son 195.000 votos y una organización política decidida, con sus errores y sus aciertos, pero decidida, que no se piensen que somos un político con el que se puede tener un acuerdo y al día siguiente no".

Sacrificios

Aragonés ha asegurado que la CUP está dispuesta a "sacrificarse con prisión y exilio": "La representación política se tiene que sacrificar por las libertades colectivas. No pasa nada si se ganan libertades", ha apuntado.

En este sentido, ha reconocido que la investidura prevista para el pasado martes, y finalmente aplazada, del candidato de Junts per Catalunya, Carles Puigdemont, "podía generar represión", pero "nunca los derechos de las libertades se han ganado sin represión".

Ha negado que la CUP haya exigido una fecha en firme para el pleno de investidura: "No queremos poner líneas rojas, pero no podemos volver a una negociación sin contenido real".

Al respecto, ha argumentado que la negociación se debe producir de manera trilateral y ha considerado que el lunes habían llegado a "buenos acuerdos" con JxCat y ERC que incluían "respuestas para evitar que la intervención del Tribunal Constitucional condicionase la voluntad del pueblo de Cataluña", además de otros pactos con contenido social.