La dirección del PNV ultima estos días el calendario de su ronda de contactos con el resto de partidos para debatir sobre la actual situación política vasca y su futuro inmediato. Solo el PP ha anunciado a través de los medios de comunicación que no participará en los encuentros porque los peneuvistas incluyen en ellos a la izquierda aberzale representada por el Partido Comunista de las Tierras Vascas (EHAK) y Acción Nacionalista Vasca (ANV) como fuerzas con presencia institucional.

Fuentes del PNV confirmaron que esperan celebrar "cuanto antes" los respectivos encuentros, aunque su difusión pública dependerá de la voluntad de los interlocutores. De hecho, admitieron que alguna cita podría haber tenido ya lugar, pero subrayaron que primará por su parte el compromiso de discreción.

Iñigo Urkullu se dirigió hace ya 10 días por carta a las direcciones del PSE, PP, EB, EA, Aralar, ANV y EHAK en la que manifestaba su disposición a contrastar análisis sobre el momento político y las posibles actuaciones para superar la incomunicación y abordar el futuro.

Lo que todavía no ha tratado la ejecutiva peneuvista, aunque prevé hacerlo en breve, es la propuesta defendida por su dirigente Joseba Egibar de concurrir a las legislativas del próximo marzo en una coalición de los partidos que defienden la celebración de la consulta anunciada por el lendakari Juan José Ibarretxe.

Tanto Eusko Alkartasuna (EA), socio del PNV en el Gobierno de Vitoria, como Aralar, escindida de Batasuna, se han pronunciado en las últimas semanas a favor de ese acuerdo para "sumar" esfuerzos y obtener una representación "potente" en el Congreso. Ezker Batua (EB) ha eludido una apuesta firme por esta entente del tripartito y Aralar, fuerza con la que Xabier Madrazo se alió para las municipales.

Esta sería la primera vez que el PNV recurre en Euskadi a una alianza para obtener representación en el Congreso.