El Cuerpo Nacional de Policía (CNP) detuvo ayer en Mataró al supuesto autor del lanzamiento de un cóctel molotov en el jardín de la casa de los duques de Palma, en el barrio de Pedralbes de Barcelona. La detención fue por la tarde, menos de 12 horas después del ataque. Varias fuentes descartaron un móvil ideológico y calificaron los hechos de acción puntual de un "desequilibrado".

La imagen del agresor, que pasará a disposición judicial en las próximas horas, había quedado grabada en el sofisticado sistema de videovigilancia que tiene el domicilio de los Urdangarín. En apenas ocho horas el individuo había sido identificado y su domicilio discretamente vigilado, aunque se le detuvo en Mataró.

"INCIDENTE" Diferentes fuentes se esforzaron en descartar cualquier vinculación del detenido con grupos radicales catalanes o de kale borroka . Es más, fuentes oficiales llegaron a asegurar que se trataba de un simple "desequilibrado". La Casa del Rey prefirió no pronunciarse sobre lo que calificó de "incidente".

Los hechos se produjeron a las cinco de la madrugada. Un individuo se acercó en coche a la calle de Elisenda de Pinós, en el barrio de Pedralbes, donde vive la familia Urdangarín. Tras descender del vehículo, lanzó un artefacto incendiario al jardín que rodea la casa.

El cóctel molotov estaba bien fabricado, y prueba de ello es que deflagró, aunque las consecuencias no pasaron de pequeños desperfectos en un vehículo estacionado en las inmediaciones de la vivienda.

En la casa no había ningún miembro de la familia. Los duques de Palma y sus cuatro hijos pasaban el fin de semana en Baleares y en el interior solo se encontraban el personal de servicio doméstico y los agentes que se encargan de la seguridad de la casa. Estos tienen una permanencia de 24 horas, estén o no los duques en la mansión.

El agresor huyó y tras él salió como mínimo uno de los agentes de la policía, pistola en mano. Algunos vecinos aseguraron ayer que se escucharon varios disparos, extremo que confirmaron fuentes no oficiales. De inmediato la casa fue aislada e intervinieron los miembros del Tedax (desactivación de explosivos) y de la policía científica, así como la brigada de información.

A partir de ahí el caso gozó de prioridad absoluta, con la colaboración de los Mossos d´Esquadra y la Guardia Civil, aunque las pesquisas policiales ya habían proporcionado pistas del fugitivo, que fue detenido finalmente en Mataró, aunque su domicilio está en Barcelona.