La policía francesa detuvo ayer a dos presuntos miembros de la banda terrorista ETA después de que éstos sufrieran dos accidentes de coche consecutivos, en dos vehículos distintos, a causa del temporal de nieve. El arresto se produjo a las 10.30 cerca de la ciudad de Toulouse. Los dos individuos, que iban armados, no opusieron ninguna resistencia, aunque poco antes sí habían esgrimido sus armas para robar un vehículo.

Anoche no habían trascendido sus nombres, aunque fuentes de la lucha antiterrorista citadas por la agencia Europa Press indicaron que los detenidos son miembros del aparato militar de ETA fugados de España en el 2002 y el 2003, respectivamente, sin delitos de sangre en su haber. Los dos viajaban con identidad falsa y uno de ellos se hacía pasar por agente de la Guardia Civil. Tras su detención, fueron trasladados e interrogados en el cuartel de Lavaur.

EXCESO DE VELOCIDAD El rocambolesco episodio se inició a las 6.30, en el término municipal de Saint Paul Cap de Joux, a unos 60 kilómetros al este de Toulouse. Los dos jóvenes circulaban en un monovolumen Renault Scenic cuando patinaron en una curva como consecuencia de la nieve y del exceso de velocidad y chocaron con un camión que circulaba en dirección contraria.

El camionero se bajó de su vehículo para comprobar los efectos de la colisión y se encontró con los dos hombres, que le amenazaron con una pistola. Minutos más tarde se detuvo en el lugar una furgoneta Iveco. Los miembros de ETA se apoderaron de este vehículo y huyeron en dirección a Lavaur, pero tres kilometros más tarde, cayeron en una zanja y continuaron a pie.

El inmediato despliegue policial en la zona posibilitó su arresto a las 10.30. Con estos dos son ya seis los miembros de la organización detenidos en el último mes. Los últimos, Asier Quintana y Gracia Morcillo, que acogían en Francia a terroristas huidos, fueron detenidos el pasado martes en Saintes en el apartamento donde vivían con sus hijos, de seis y dos años.