La Dirección General de Tráfico (DGT) ha puesto en marcha hoy una nueva campaña de vigilancia y control de los autobuses. Hasta el próximo domingo, los agentes vigilarán especialmente el uso del cinturón de seguridad por parte de los pasajeros e impondrán sanciones de 200 euros a todos aquellos que no lo lleven puesto, siempre y cuando el vehículo cuente con ese sistema de seguridad.

La iniciativa surge del incremento del número de desplazamientos que se producen en verano, mucho de ellos en autobús. A lo largo de la semana, la Guardia Civil controlará más de 4.000 autobuses e inspeccionará tanto en el estado de los vehículos como de los conductores.

Uno de los aspectos que se tendrán más en cuenta en este tipo de revisiones será el uso del cinturón de seguridad, en la medida en que su uso reduce significativamente el riesgo de sufrir lesiones graves o mortales.

USO OBLIGATORIO DESDE 2007Los autocares matriculados desde 2007 están provistos de este dispositivo de seguridad, por lo que es obligatorio el uso de los cinturones por parte de pasajeros y conductor tanto si se circula por vías urbanas como por interurbanas.

Los agentes comprobarán el tacógrafo, así como los requisitos especiales que debe cumplir el conductor en referencia a su permiso para conducir y los tiempos de conducción y descanso. También les someterán a controles de alcoholemia.

En 2009, de las 1.903 víctimas mortales que se registraron en las carreteras españolas, 18 viajaban en autobús, lo que supone menos de un 1% del total.