La campaña electoral concluyó oficialmente el viernes a medianoche, pero sólo en Cataluña. En plena jornada de reflexión, la cúpula estatal del PP aprovechó los actos públicos en el resto de España para seguir remachando las consignas de su candidato a la Generalitat, Josep Piqué. Así lo hicieron el secretario general del partido, Mariano Rajoy, y el ministro portavoz, Eduardo Zaplana.

La ley electoral prohíbe la difusión de "propaganda" en la víspera de elecciones. Pero nada impide que los medios audiovisuales se hagan eco de las declaraciones de ese día en comunidades en las que no hay comicios.