La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, rechazó hoy las peticiones de dimisión de cuatro de los siete grupos con representación parlamentaria (PP, CiU, ERC e IU-ICV) y aseguró que sólo abandonará el cargo si así se lo pide el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. "Soy una ministra del Gobierno y tengo el apoyo del presidente", dijo Álvarez antes de añadir: "Bienvenido sea el día en el que el presidente decida que debo dejar el cargo".

Las explicaciones y las cifras facilitadas hoy en el Congreso por la ministra para aclarar las incidencias en las infraestructuras de Cataluña no convencieron a la mayoría de grupos parlamentarios, que le acusaron de dar datos de inversión falsos y de "incapacidad" en la gestión. Sólo el PSOE defendió "el esfuerzo inversor" del Gobierno en las infraestructuras catalanas.

La ministra, durante su comparecencia, a petición propia, ante la Comisión de Fomento, pidió de nuevo paciencia a los ciudadanos catalanes y comprensión a los grupos. A éstos les solicitó que tuvieran en cuenta el esfuerzo inversor del Ejecutivo en Cataluña, "el mayor de la historia", con un presupuesto para infraestructuras de 7.850 millones de euros entre 2004 y 2007, de los que ya se han ejecutado alrededor del 65 por ciento (5.183 millones). "Comprendo la frustración que sienten los ciudadanos de Cataluña y por ello reitero mis disculpas", dijo Álvarez, quien añadió que se está trabajando para "solventar los déficit heredados", que atribuyó a los gobiernos del PP y de CiU.

El secretario general del grupo del PP en el Congreso, Jorge Fernández Díaz, negó esta acusación y recordó que la inversión del Estado en Cataluña pasó de 571 millones de euros en 1996 a 2.740 en 2004. Afirmó que el Gobierno de Rodríguez Zapatero no ha puesto en marcha "ni una sola obra pública de infraestructuras importante" en esta comunidad y recalcó que, además, "ha mal ejecutado las promovidas" por los ejecutivos del PP. Por ello, subrayó que si la mayoría de los diputados de la Comisión de Fomento volvían a reprobar su gestión, a la ministra "no le queda más que la dimisión" o pedir su cese. "Usted no tiene el apoyo de esta Cámara y esta Cámara representa a los ciudadanos y a la soberanía popular", apostilló el diputado popular, para quien Álvarez se ha demostrado "incapaz" de dar respuesta a los problemas de las infraestructuras catalanas.

A esta petición de dimisión se unieron los grupos catalanes en la Cámara Baja (CiU, ERC e IU-ICV). El diputado de la coalición nacionalista Jordi Jané opinó que la ministra no dice la verdad ya que, a su entender, el Gobierno, durante estos tres últimos años, ha invertido en Cataluña entre un cuatro o un cinco por ciento menos que el peso de la comunidad autónoma en el PIB nacional (18,8 por ciento).

El parlamentario de ERC Joan Puig afirmó que, de acuerdo con los números mostrados por la ministra, "parece que Cataluña ha recibido dinero a manta", lo cual, apuntó, es "falso", ya que "la realidad es que los servicios están en una situación caótica". "Le pedimos la dimisión debido a su incapacidad para gestionar las crisis y por dar cifras que no son ciertas", resumió Puig.

En representación del grupo de IU-ICV, Joan Herrera criticó no tanto la cantidad de tales dotaciones como "la orientación" de las mismas, ya que, a su juicio, la red de alta velocidad no ha de absorber las cuantías principales sin previamente mejorar el servicio de cercanías barcelonés.

Por el contrario, Álvarez afirmó que no presume de datos sobre la inversión del Gobierno en Cataluña, sino que aporta cifras oficiales que "no son discutibles" y están "certificadas por los funcionarios del Estado". Según los datos manejados por la titular de Fomento, la inversión en Cataluña es superior a la aportación que esta comunidad hace al PIB, un 18,85 por ciento.

En los presupuestos de este ejercicio la partida destinada a Cataluña ha supuesto el 19,61 por ciento del total, las de 2006 ascendieron al 20,2 por ciento y en 2005 fueron superiores al 17 por ciento del total, aseguró. Asimismo, destacó que desde que comenzó la legislatura, Fomento ha licitado obras en Cataluña por un importe 5.980 millones de euros, 1.716 millones más que en el conjunto de la legislatura anterior.

Para Álvarez estas cifras demuestran el compromiso del presidente Rodríguez Zapatero con Cataluña y adelantan lo previsto en su nuevo Estatuto.