El 10 de noviembre es el único día del año, de cualquier año en la historia contemporánea, en el que los vascos no han de recordar a ninguna víctima del terrorismo. Bajo ese recuerdo, Euskadi celebró ayer por primera vez el Día de la Memoria, en el que se rindió tributo a todos los damnificados por el terrorismo, sin excepciones, y se reivindicó un futuro de "paz, libertad y tolerancia", como subrayaron los organizadores.

Instituciones y allegados de las víctimas compartieron una jornada" que se inició con la inauguración de una escultura del artista Agustín Ibarrola en los jardines de Ajuria Enea --residencia oficial del lendakari-- , y concluyó a última hora de la tarde en el municipio guipuzcoano de Andoain. Entre uno y otro momento se sucedieron plenos extraordinarios y actos de homenaje que, pese a contar con un seguimiento mayoritario no lograron la anhelada unidad de las fuerzas políticas y la sociedad civil vasca.

El lendakari, Patxi López, fue el hilo conductor de la jornada de tributo y subrayó la "deslegitimación ética, política y social del terrorismo". Tanto en Ajuria Enea como en el Parlamento vasco y el resto de instituciones se leyó una declaración pactada por el PSE, el PP, el PNV y EB. No se añadieron a ella ni Euskal Alkartasuna (EA) ni Aralar.

"OBJETIVO PRIORITARIO" El documento deja constancia de que el final del terrorismo y la consecución de la paz son el "objetivo prioritario" de la sociedad vasca y que la memoria de las víctimas contribuirá a construir "un relato compartido y genuino" de lo ocurrido". También se explicita que el recuerdo y la necesidad de reparación incluye a todas las víctimas, las de ETA, que es el "único grupo terrorista que todavía amenaza la convivencia entre los vascos", pero también las del GAL, el Batallón Vasco Español y "otros grupos violentos". La decisión de no mencionar en el documento a las víctimas del franquismo y a las que murieron por actuaciones de las fuerzas de seguridad de Estado, fue el desencadenante del desmarque de EA y Aralar.

Entre los actos destacó el que recordó en la academia de policía de Arkaute (Alava) a los 15 agentes de la Ertzaintza que han sido asesinados por ETA y a los que el lendakari nombró uno por uno para reivindicar su "sacrificio irrepetible".

La izquierda aberzale no quiso que la jornada transcurriera sin incluir su mensaje. Por eso, familiares y amigos de Santiago Broaurd y Josu Muguruza, asesinados en Bilbao y Madrid el 20 de noviembre de 1984 y 1999, participaron en sendos actos de homenaje. Edurne Broaurd calificó de "ejercicio de hipocresía" celebrar una jornada que, según manifestó, "deja fuera" a la mayoría de las víctimas.