La elección de Miguel Sanz como presidente de Navarra ha provocado un auténtico terremoto en el socialismo navarro. La decisión de la ejecutiva federal de permitir la elección del candidato de UPN, la marca electoral del PP, ha provocado una incontrolable contestación interna. A las dimisiones del candidato Fernando Puras y de la dirección de las Juventudes Socialistas en esta comunidad, se sumaron ayer las de cuatro miembros de la Ejecutiva regional.

Tras dos meses y medio de espera, finalmente Navarra cuenta con un nuevo presidente, apoyado por 24 escaños en una Cámara de 50; 22 de su partido y 2 de CDN. Nafarroa Bai e IUN votaron en contra. Los 12 parlamentarios socialistas respetaron la disciplina de partido y votaron en blanco. No lo tuvieron fácil, porque en el exterior de la Cámara se concentraron varias decenas de simpatizantes del PSN y Nafarroa Bai, que increparon a los representantes de PSN y UPN.

Los momentos más tensos se vivieron a la salida de Carlos Chivite, el secretario general de los socialistas navarros. Los escasos agentes de la policía navarra desplegados se tuvieron que emplear a fondo para evitar el contacto físico de los más exaltados con el coche que se lo llevó a toda velocidad, mientras arreciaban los gritos: "Traidores", "Esto es un atraco", "Vendidos".

RENUNCIAS Los cuatro miembros de la ejecutiva regional que anunciaron ayer su decisión de dimitir fueron Mariano Cerezo (secretaría de Empleo), Lourdes Montero (Infraestructuras, comunicación y telecomunicaciones), Teresa Iradiel (Desarrollo Rural, Agricultura y Ganadería), y María Luisa Osta (Formación). A esta lista hay que sumar la dimisión de la exsecretaria general de las Juventudes Socialistas de Navarra, Irene Lapuerta, que también formaba parte de la dirección regional del partido en el área de Bienestar Social. El enfado de muchos militantes y agrupaciones electorales alcanzó ayer su punto máximo, con la constatación de que las expectativas de un cambio político en la comunidad quedaban definitivamente frustradas. Los dimisionarios consideran inadmisible que se haya optado por ceder el poder a UPN.

Alguno de estos dirigentes medita mantenerse en el cargo hasta el 1 de septiembre, cuando está prevista la visita de José Blanco a la sede del PSN para asistir a la reunión del comité regional y explicar el veto del PSOE al pacto con Nafarroa Bai. Sanz adelantó que mantendrá una entrevista con el jefe del Ejecutivo central, José Luis Rodríguez Zapatero. Pasados unos días "de descanso" tras el proceso de su reelección, se llevará a cabo este encuentro. El presidente se comprometió en su discurso de investidura a mejorar las relaciones con el Gobierno.