ERC ha presentado más de 300 enmiendas a los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2021. Unas enmiendas que el portavoz del partido en el Congreso, Gabriel Rufián, ha pedido que estas negociaciones, que deberán estar cerradas el próximo viernes, se lleven a cabo entre el Gobierno central y la Generalitat de Cataluña.
Rufián ha explicado que en las conservaciones en esta recta final de la negociación de las Cuentas públicas deben estar representado el Ejecutivo de coalición con representantes del PSOE y de Unidas Podemos y el Govern de la Generalitat con miembros de Esquerra Republicana de Cataluña para "negociar e intentar hablar" de este asunto. A este respecto, Rufián ha apuntado que está "convencido" que el lendakari, Íñigo Urkullu, ha intervenido la negociación para lograr sus objetivos.
LAS EXIGENCIAS
El diputado republicano catalán ha señalado que las 320 enmiendas que han presentado a los Presupuestos -el plazo para registrarlas acaba este mediodía- se pueden dividir en dos grandes grupos: "enmiendas de protesta" y "enmiendas de propuesta".
El primer bloque está constituído, principalmente, por cinco grandes enmiendas a la totalidad de las secciones relativas al Tribunal Constitucional, por estar "politizado", al Ministerio del Interior, por ser "opaco" con sus gasto, al Ministerio de Defensa, por el enorme gasto en "tanques y balas", al Tribunal de Cuentas, por ser un "órgano más de represión" del independentismo", y a la Casa Real.
Por otro lado, han registrado enmiendas de "propuesta" para "ampliar el escudo social". A este respecto, ha enunciado varias de sus exigencias: subir impuestos a las rentas del capital, eliminar el IVA a los productos de higiene femenina, aumentar las tributaciones del juego online, aumentar los fondos para la dependencia y los ayuntamientos.
EL 'NO' DE LA CUP
Con quien no hay capacidad de negociación es con la CUP. La diputa del partido independentista catalán Mireia Vehí ha asegurado que no hay margen para que apoyen los Presupuestos porque aunque son "muy expansivos", serán pagados con las ayudas de la Unión Europea y, por lo tanto, derivarán en "recortes inmediatos".
