La Ertzaintza descubrió el sábado en Amorebieta (Vizcaya) un zulo (agujero) que ETA habría habilitado hace apenas unos días y en el que se escondían 60 kilos de sustancias químicas, además de detonadores, para fabricar explosivos. El hallazgo es el primer indicio de que la banda se está reorganizando en España desde que se inició la tregua, en marzo pasado. La Guardia Civil localizó otro en el pequeño municipio guipuzcoano de Ezkio-Itsaso, pero se considera que fue abandonado hace unos dos años.

Desde el Departamento vasco de Interior se precisó que la localización del zulo fue una "casualidad". De hecho, un ertzaina de la unidad de caninos y libre de servicio salió de paseo al monte con su perro y fue el animal el que se empeñó en olfatear un determinado punto.

Adiestrado para localizar explosivos, el perro condujo al agente hasta el zulo, que no se encontraba excesivamente alejado del camino en la zona boscosa de Amorebieta.

PRUDENCIA La Ertzaintza dijo que el bidón semienterrado apenas llevaba unos días en el lugar. En su interior se encontraron varias prendas, así como una tienda de campaña, gafas y detonadores. En bolsas y protegida, se hallaba una sustancia blanca y granulosa, cuya composición exacta se investigaba anoche.

Fuentes de la Consejería de Interior confirmaron que no existe duda alguna de que el material encontrado es de ETA y que sirve para la fabricación de artefactos explosivos. Sin embargo, desde el departamento que dirige Javier Balza (PNV) se manifestaron prudentes y evitaron valorar a qué obedece su traslado hasta Vizcaya. "Todavía es pronto para sacar conclusiones", matizaron.

El otro zulo localizado en un paraje de Tolosa estaba formado por dos bidones y en su interior solo se hallaron cartuchos de caza ya caducados. Se avanzó que podría haber sido abandonado hace años, aunque su descubrimiento ha sido posible ahora gracias a la información reflejada en documentos intervenidos por la policía francesa en las últimas operaciones contra ETA.

El Gobierno vasco condenó el sábado los ataques que los radicales han dirigido durante los últimos días contra viviendas de dos agentes de la Ertzaintza en Rentería y Bilbao. El primero de los sabotajes se produjo en la madrugada del viernes en Bilbao, aunque el dato se conoció el sábado. Los radicales utilizaron un cohete pirotécnico que afectó a la ventana de un vecino del agente. Los encapuchados de Rentería lanzaron un cóctel incendiario que ennegreció la fachada de la casa. Además, unos desconocidos incendiaron la madrugada del sábado dos cajeros en Barakaldo.