Los militares de la fragata Navarra, integrada en la operación Atalanta de la Unión Europea (UE), arrestaron ayer a seis supuestos piratas y recuperaron el cadáver de un séptimo después de que los bucaneros intentaran secuestrar un mercante panameño en aguas de Somalia.

Según fuentes del Ministerio de Defensa, el mando de la operación europea pidió a la fragata que acudiera en ayuda del buque, que estaba siendo atacado en una zona cercana a las costas del país africano. Cuando los militares españoles llegaron a la zona, la seguridad privada del mercante ya había conseguido repeler el ataque y se encontraron en la zona dos esquifes y una ballenera que, según esas fuentes, "podría haberse utilizado como embarcación nodriza". Una vez interceptadas las naves de los corsarios, los militares de la Navarra hallaron en uno de los esquifes el cadáver de un pirata que, supuestamente, murió como consecuencia de los disparos realizados por la seguridad privada.

Fuentes de Defensa explicaron ayer por la noche que será el mando de la Operación Atalanta el que decida a quién se entrega a los seis piratas detenidos. Es la tercera vez que el Ejército arresta a corsarios en el Indico.