La Constitución europea, pactada en la cumbre de Bruselas, definió un poder realista para España en la Unión Europea y le otorgó una capacidad de influencia en el Consejo de Ministros de la UE mucho más próxima a la de los grandes países.
Un periodo bajo el Tratado de Niza
El nuevo sistema de voto en el Consejo de Ministros de la UE y el nuevo reparto de escaños en el Parlamento Europeo se aplicarán en el 2009. Hasta el próximo 1 de noviembre, el reparto de votos en el Consejo de Ministros será el tradicional con el que España entró en la UE (8 votos para España y 10 para Alemania, Francia, Italia y Gran Bretaña).
El reparto de votos del Tratado de Niza comenzará a aplicarse el 1 de noviembre, coincidiendo con el inicio de la nueva Comisión Europea, donde España, como los otros grandes países, perderá un comisario. España tendrá en los próximos cinco años un poder sobredimensionado de 27 votos en el Consejo de Ministros, frente a los 29 de los otros cuatro grandes. Para bloquear una decisión serán necesarios 90 votos de los 321 totales o que no esté respaldada por el 62% de la población de la UE.Equilibrio entre países grandes y pequeños
A partir del 1 de noviembre del 2009, si la Constitución europea es ratificada por todos y entra en vigor, las decisiones en el Consejo de Ministros se adoptarán por el 55% de los estados (15 como mínimo) que representen al menos al 65% de la población de la UE. Para bloquear una decisión en función del criterio de población serán necesarios cuatro estados como mínimo. Esta fórmula supone un reparto de poder equilibrado entre los países grandes y los pequeños. El sistema permitirá formar seis veces más mayorías que el rígido Tratado de Niza. España, según el criterio de población, tiene una fuerza de bloqueo equivalente al 24% de la requerida en la futura UE de 27 miembros. Como los otros países más poblados necesitan también formar un grupo de al menos cuatro estados para paralizar una decisión, la capacidad de influencia de España se aproxima a la de los otros grandes. España, con la doble mayoría, por ejemplo, puede formar con facilidad minorías de bloqueo con los países del sur para defender sus intereses agrícolas.Más eurodiputados en lugar de perderlos
Debido al Tratado de Niza, España ha perdido 10 eurodiputados en la nueva legislatura que ahora comienza y se ha quedado con 54. España fue el país que sufrió una pérdida de representación más drástica en el Parlamento Europeo para dejar un hueco a los nuevos estados. Después del ingreso de Bulgaria y Rumanía en la UE, España hubiera perdido otros cuatro eurodiputados en el 2009, según el Tratado de Niza.
La Constitución europea, por el contrario, permitirá incrementar los eurodiputados españoles en el 2009 en cuatro o cinco respecto a lo que le hubiera correspondido según Niza, gracias a los 21 escaños a repartir por el aumento del número total y la renuncia de Alemania a tres de los suyos.
