Por tercer mes consecutivo desde el atentado de ETA en el aeropuerto de Barajas (Madrid), el terrorismo sigue siendo el primer problema para los españoles. No obstante, la preocupación de los ciudadanos baja 4,2 puntos con respecto al mes anterior y se mantiene en los niveles más bajos registrados desde el inicio de la democracia.

Así lo refleja el último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), divulgado ayer, cuya novedad más llamativa estriba en que "la clase política y los partidos políticos" se sitúan por vez primera en el círculo de los cinco mayores problemas de los ciudadanos. En concreto, se colocan en el quinto lugar, después de la vivienda y por encima del interés por los problemas económicos.

Realizada entre el 17 y el 23 de marzo pasado, la encuesta muestra cómo el bombazo de ETA del 30 de diciembre en la terminal T-4, que costó la vida a dos inmigrantes ecuatorianos, sigue pesando en el ánimo de los españoles a la hora de inventariar sus preocupaciones. Sin embargo, y pese a que el terrorismo ocupa de nuevo el primer lugar del ranking, su incidencia como problema para la población es mucho más baja que durante el Gobierno de José María Aznar.

Bajo mandato del PP, los barómetros solían situar el paro y el terrorismo como primera y segunda preocupaciones, respectivamente, pese a que Aznar se jactaba de haber vencido al desempleo y doblegado a ETA. En la última encuesta bajo mandato popular, poco después del 11-M, el terrorismo fue el principal problema para el 73,4% de los españoles, y el paro quedó en segundo lugar para el 51,7%. En el último barómetro, ambos porcentajes están en torno al 38%.

Al PP no le importa demasiado que Zapatero haya reducido la preocupación por el terrorismo y el paro a niveles desconocidos por el anterior Ejecutivo. El secretario general de los conservadores, Angel Acebes, prefirió recalcar ayer el hecho de que el terrorismo se mantenga por tercer mes consecutivo como primera inquietud de los españoles.

MENOR INCIDENCIA A su vez, el portavoz del PSOE en el Congreso, Diego López Garrido, destacó que la preocupación por el terrorismo ha bajado respecto al mes anterior. Argumentó, además, que este fenómeno ha tenido en esta legislatura la "menor incidencia real" desde el inicio de la democracia. También celebró López Garrido el descenso del porcentaje de españoles que citan el paro como problema, así como el ligero descenso de la inquietud por la inmigración tras tres meses de marcado aumento.

Aunque la encuesta no entra en el fondo del asunto, la irrupción de la clase política y los partidos políticos como el quinto mayor problema que preocupa a los españoles podría estar relacionado con el clima reinante de confrontación y con algunos de sus comportamientos. El porcentaje de encuestados que consideran a los políticos un problema casi duplica el 9,1% que lo asumían como tal en el barómetro publicado hace un año.