La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, asegura, en una entrevista que publica hoy en portada el diario "El Mundo", que la "inmensa mayoría de los votantes del PP" están "desconcertados" con el "permanente viaje al centro" de su partido. En la misma Aguirre señala además que "lamenta" que haya algunos dirigentes que, "debiéndole todo a Aznar", digan ahora "que es un 'hijo de puta'. Eso demuestra su calidad humana".

A su vez, la responsable de la Comunidad de Madrid opina que es "sorprendente" que la nueva dirección del partido "pretenda volver al centro sin explicar por qué la anterior dirección dirigida por (Mariano) Rajoy, se alejó de él". En este sentido, se muestra convencida de que el centro "no puede ser un viaje interminable, al que nunca llegamos. ¿Pero no estábamos en el centro con Aznar? Pues si estábamos en el centro con Aznar ¿cuándo nos hemos ido y porqué? ¿qué es el centro? Para mi, el centro es la ausencia de dogmatismo, estar abiertos a todo y a todos".

A su vez, la presidenta de la Comunidad de Madrid señala que se siente "muy bien" siendo un "verso suelto" porque considera que para estar tranquilo en esta vida "lo que tiene uno que estar es de acuerdo con sus principios" y ella todas las decisiones que ha adoptado "las he tomado de acuerdo con ellos". También, se considera un "verso suelto" que "rima" con la "inmensa mayoría" de los votantes del PP, que "estamos encantados" de pertenecer "a un partido de centro derecha".

En otro momento de la entrevista, a dos páginas, indica que en el reciente Congreso del PP celebrado en Valencia no se produjo "la integración de los críticos" del partido, aunque reconoce que ahora "tenemos que volcarnos en apoyar a Rajoy" y que éste "debe procurar integrar a todos".

Tras indicar que dicho encuentro no fue el final de nada, subraya que es el "inicio de una nueva etapa" y que ella tiene "una gran confianza" en la nueva dirección del PP. Por último, y tras destacar que no le gustó que en su discurso Rajoy no mencionara a la presidenta del PP vasco, María San Gil, opina que los aplausos de la oposición a la continuidad de Rajoy "son envenenados".