El pacto que Esquerra Republicana ofrecerá al PSOE para garantizar la estabilidad parlamentaria del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero podría no circunscribirse sólo al 2005, sino abarcar los tres años que restan de legislatura. Josep Lluís Carod- Rovira abrió ayer la puerta a esta posibilidad tras la reunión que celebró la ejecutiva de su partido, aunque apuntó algunas condiciones. Entre ellas, que el PSOE "sea lo suficientemente valiente como para no tener miedo de la expresión democrática de los parlamentos": el vasco, que ya ha aprobado el plan Ibarretxe , y el catalán, que previsiblemente hará lo propio con el Estatuto.

Los republicanos consideran un buen síntoma que Zapatero se haya desmarcado del rechazo frontal del PP a la tramitación parlamentaria del plan Ibarretxe . "Es lo que toca --dijo Carod-- en el caso de un partido el PSOE que articula su discurso a partir de la defensa de la España plural". Y consideró que si los socialistas apuestan por profundizar en esta diversidad plurinacional, podrá hablarse de un pacto de estabilidad con ERC "de seis meses, de un año o de tres años".

En todo caso, los republicanos sólo decidirán el alcance de su oferta de alianza cuando conozcan el grado de compromiso que el PSOE está dispuesto a asumir. Ello no sucederá hasta febrero, cuando presentarán por escrito su oferta al portavoz parlamentario del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, con quien el presidente del grupo de ERC en el Congreso, Joan Puigcercós, ya ha mantenido varios contactos.

El primer borrador que ERC tiene sobre la mesa recoge muchos de los ejes programáticos del tripartito catalán, que los republicanos reclamarán que el PSOE haga suyos a cambio de apoyar los presupuestos generales del 2006 y, en caso de ampliarse el pacto, también los de los dos años siguientes. Entre las demandas están, entre otras, la aceptación del Estatuto que salga de Cataluña y la resolución de la deuda sanitaria.