El juez Baltasar Garzón asegura en un auto de prisión que la célula islamista desarticulada la pasada semana estaba dividida en dos grupos que se iban a sustituir cuando el primero volara la Audiencia Nacional. En la lista de objetivos de la segunda célula figuraban varios edificios representativos de Madrid y las estaciones de Atocha y Príncipe Pío. Garzón ordenó ayer el ingreso en prisión de cuatro de los últimos 13 detenidos.
El magistrado explica en el auto que el emir (jefe) Mohamed Achraf --detenido en Suiza-- montó este grupo salafista radical en la cárcel de Topas (Salamanca) entre los años 2001 y 2003. Esa célula se integró en una de las corrientes más radicales del islamismo y "habría inspirado los atentados del 11-M".
Achraf captó a 31 presos musulmanes condenados por delitos comunes. Y los dividió en dos grupos. El primero estaba bajo su mando y debía volar la Audiencia con un camión con 500 kilos de explosivos. Tres de los detenidos estaban listos para suicidarse en esa acción.
El segundo grupo, según el juez, estaría controlado por Addila Mimon, detenido en la prisión de Pontevedra en la primera fase de esta operación. En el registro practicado en su celda se halló documentación con "diferentes objetivos terroristas" como las estaciones ferroviarias de Atocha y Príncipe Pío, y edificios como las Torres Picasso, la sede del Partido Popular, el Palacio de Congresos y Exposiciones y el estadio del Real Madrid.
LAS CARTAS Mimon, cuyo nombre verdadero es Dibali Abdellah, mantuvo correspondencia con dos de los condenados por el atentado contra el World Trade Center en Nueva York en 1993. También se carteó con Abdelkrim Bensmail, otro de los detenidos, y miembro del GIA, arrestado junto al jefe del 11-M y uno de los terroristas suicidas, Allekema Lamari. En una de esas cartas, escrita en octubre del 2003, le decía: "Debemos levantar la bandera de la unificación entre todos los musulmanes y que la palabra de Dios y su profeta nos guíe. Los musulmanes no tienen otra opción que no sea la Yihad".
Garzón explica que en el grupo de Mimon figuraban los tres detenidos en la cárcel de Pontevedra el jueves. Són Subi Kuni, miembro del grupo del GIA que cumple condena desde el 2001. Mohamed Amin, de origen palestino, con numerosos antecedentes y que ha llegado a usar 17 identidades falsas. Y Aspri Smali, extremadamente violento, con multitud de antecedentes por tráfico de drogas, y que, según el juez, actuaba "siempre a las órdenes de Mimon".
En esta célula jugó un papel destacado Mustafá Zanibar, que "ejerció gran influencia sobre los demás miembros" y que ingresó en la cárcel de Pontevedra en julio del 2003 después de estar internado en Topas, aunque ahora estaba recluido en la cárcel de Nanclares de Oca (Alava). Al cerrar esta edición, el juez continuaba interrogando a los otros ocho detenidos tras dejar en libertad a uno.
