El esperado comunicado de ETA confirmó ayer que, para la banda, el atentado de Barajas no supone una ruptura del alto el fuego, sino una "respuesta" a "los ataques contra Euskal Herria" por parte del Gobierno. Menos de 24 horas después de que Batasuna emplazara a ETA a confirmar que mantenía el alto el fuego, la banda asegura en un texto en euskera remitido ayer al mediodía al diario Gara, que sigue siendo posible "un acuerdo político que solucione el conflicto", pero advierte de que no renuncia a nuevas acciones violentas en función de la actitud del Gobierno. Con todo, señala que en el atentado de Barajas no pretendían causar víctimas, y culpa a las fuerzas policiales de no haber desalojado con celeridad el aparcamiento tras sus llamadas de advertencia.

La banda desgrana en tres folios las razones del "bloqueo del proceso", que en su opinión "no se mueve ni para adelante, ni para atrás", pero en el que no incluye la autocrítica. Utilizando los mismos argumentos que en otros comunicados durante la tregua, y con un tono más duro, recrimina a los socialistas que hayan puesto como límites a las conversaciones "la Constitución española y la legalidad".

El comunicado no hace alusión alguna a promesas del Gobierno en reuniones secretas y se limita a acusarle de que "continúa sin cumplir sus compromisos de alto el fuego", en referencia a la presión policial y judicial, pero sin mayor detalle.

EL PNV DE IMAZ ETA también denuncia al "PNV de Imaz" por haber "alimentado la estrategia del Gobierno de España contra la izquierda aberzale". La alusión al presidente del PNV, Josu Jon Imaz, hay que entenderla como reproche por su buena sintonía con los socialistas.

En su lista de reproches, ETA recuerda a sus dos militantes muertos el pasado año "en las cárceles de exterminio de España" y apela a la trascendencia de su declaración del alto el fuego, a la vez que critica al PSOE por limitarse "a publicar filtraciones sobre el proceso y las conversaciones". La vigencia de la ley de partidos, la aplicación de la doctrina Parot --restricción de beneficios penitenciarios--, las operaciones policiales y la política penitenciaria, son muestras para ETA "de la crónica cruel de una estrategia de represión que no ha parado en estos nueve meses". El texto alude a la situación de Iñaki de Juana Chaos, que tilda "de crueldad sin límites".

ETA reitera que la solución al conflicto es "el reconocimiento de los derechos nacionales de Euskal Herria", es decir, "el respeto a lo que decidan los ciudadanos vascos y la superación de la división territorial", demandas que considera mayoritarias en la sociedad vasca. Y dice que aún es posible "desarrollar el proceso democrático", y anima a los partidos y entidades sociales a "trabajar" por ese objetivo.

ADVERTENCIAS El párrafo más contundente advierte de que las futuras decisiones de ETA dependerán del comportamiento del Gobierno. Pese a afirmar que su voluntad es "fortalecer" el proceso de paz, asegura que "mientras se mantenga la situación actual, ETA tendrá toda la determinación para responder".

En cuanto al atentado de Barajas, la banda transmite su "más sincero pésame" por las dos víctimas a sus familias, amigos "y al pueblo de Ecuador".