Saber que iba a ser padre de su primer hijo junto a la etarra también encarcelada Eider Pérez pesó demasiado en Igor Solana, quien, en el verano del 2007, comunicó a ETA que no participaría en la fuga que debía protagonizar junto a Jorge García Sertucha, huyendo en helicóptero del patio de la prisión de Huelva. La pareja tuvo un niño en marzo del 2008; el pasado febrero, Solana, miembro del desarticulado comando Andalucía , obtuvo el traslado a la prisión valenciana de Picassent, donde los tres comparten celda.

La decisión de Solana de echarse para atrás en el último momento abortó el primer plan de fuga, previsto para el verano del 2007, pero la dirección de ETA mantuvo su compromiso con García Sertucha de rescatarlo en helicóptero de la prisión de Huelva, donde cumple una condena de 37 años por intentar matar al Rey en 1995. Quién le acompañaría en la evasión era lo de menos, según se desprende de la numerosa documentación intervenida a Francisco Javier López Peña, Thierry , exjefe de ETA tras su detención en Francia, en mayo del 2008, y a dos cartas que Sertucha consiguió sacar de la prisión de Huelva y en las que se incluían referencias a la fuga.

A pesar de la detención de Thierry , el desarticulado comando Vizcaya , liderado por Arkaitz Goikoetxea y Jurdan Martitegi, quiso seguir adelante con el plan ante el convencimiento de que la fuga en helicóptero iba a suponer un gran golpe de efecto que debía inyectar ánimos a sus maltrechas y desorientadas tropas. Pero en julio del 2008 la Guardia Civil desmanteló en Vizcaya el comando y Goikoetxea fue arrestado. El plan se frustró otra vez. En abril, Martitegi fue detenido en Francia.

DOS ´COMANDOS´ Para llevar a cabo el plan, ETA designó a dos comandos , que se desplazarían desde Francia para acometerlo. El de liberados (a sueldo de la banda) secuestraría al piloto del helicóptero y a su familia, que quedaría retenida hasta que la aeronave aterrizara en Portugal tras volar los 50 kilómetros en línea recta que separan el país vecino del patio de la cárcel de Huelva. Goikoetxea y Martitegi eran los elegidos. El otro comando, de los denominados legales , se encargaría de la infraestructura en Portugal, que debía garantizar la permanencia de los fugados. Y esta función la asumieron, según fuentes de la lucha antiterrorista, Asier Borrero, huido desde la caída del comando Vizcaya e identificado el martes en Francia como uno de los dos etarras que disparó contra un gendarme, y su novia Inge Urrutia, una de las siete detenidas el sábado por la Guardia Civil, a la que se acusa de formar parte del grupo de apoyo tras la huida.

En junio del 2008, Borrero y su novia se desplazaron a Huelva, recorrieron la provincia y saltaron hasta Portugal, en coche, realizando, según fuentes antiterroristas, "unos desplazamientos de enorme incoherencia". El viaje debía servir, según las mismas fuentes consultadas, para actualizar los datos sobre la fuga, especialmente para elegir el lugar en el que debería aterrizar el helicóptero, y "verificar la vigencia de los itinerarios de huida".

En cuanto al abogado Iñaki Goyoaga, los investigadores sostienen que fue utilizado por Sertucha, tras un encuentro en la cárcel, para hacer llegar a ETA el nombre del que debía ser su nuevo compañero de evasión, después de que la paternidad echara atrás a Solana.