La Audiencia Nacional ha condenado a 343 años de prisión al ex dirigente etarra José Javier Arizkuren Ruiz, "Kantauri", por ordenar un atentado en 1996 contra un autobús militar en Córdoba, en el que murió un sargento, y a otros 68 años por otro atentado en Vitoria, en 1985, que causó cuatro heridos.

El tribunal que juzgó a "Kantauri" el pasado 29 de noviembre por los hechos de Córdoba le considera responsable de los delitos de atentado terrorista contra miembros de las Fuerzas de Seguridad, con resultado de muerte, 24 delitos de asesinato en grado de tentativa y otro de estragos, unas imputaciones por las que el fiscal había solicitado 429 años.

De acuerdo con la sentencia hecha pública hoy, el que fue máximo responsable del aparato militar de ETA creó el "comando Andalucía" y ordenó a sus integrantes que fabricaran tres artefactos explosivos para atentar contra un microbús del Ejército, que diariamente hacía el recorrido desde el centro de Córdoba hasta el acuartelamiento del Cerro Muriano.

Dos de los tres artefactos fueron colocados en sendos vehículos robados mientras que un tercero lo situaron dentro de un contenedor de basuras, todos ellos en una zona de la avenida de Carlos III prevista para el paso del autobús militar, al menos ocupado por 20 personas.

La carga explosiva fue accionada el 20 de mayo de 1996, pero únicamente hizo explosión la bomba del contenedor de basuras, que causó la muerte al sargento Miguel Ángel Ayllón y heridas a un capitán y a otras dos personas que circulaban en su vehículo delante del autobús militar. Además, le condena a indemnizar a la familia del sargento asesinado a 180.303,63 euros y a 96.010 a los tres heridos.

La Audiencia Nacional ha condenado también a "Kantauri" a otros 68 años y cuatro meses de prisión por ametrallar a una patrulla de la Policía en 1985 en el polideportivo de Mendizorroza, en Vitoria, y causar lesiones a dos agentes y a dos técnicos de Televisión Española.

Por estos hechos, el tribunal que le juzgó el pasado 30 de noviembre, le acusa de los delitos de atentado contra los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, asesinato frustrado, lesiones graves y robo de vehículos con intimidación y toma de rehenes.

El tribunal, cuya condena es la misma que la pena solicitada por la Fiscalía, señala en el fallo que Arizkuren, junto a otros tres miembros del comando "Araba" del que formaban parte, planeó un atentado contra la patrulla policial que solía escoltar la unidad móvil de Televisión Española en el mencionado polideportivo. De esta forma, el 10 de marzo de 1985 y con ocasión de un partido de baloncesto, los cuatro etarras robaron un vehículo a punta de pistola en el interior de un garaje de la capital alavesa y obligaron a su propietario a introducirse en el maletero.

Después, se dirigieron hacia el estadio deportivo donde, armados con metralletas, dispararon "sin previo aviso y de manera repetida" sobre los policías "con intención de matarlos o herirlos", pero al encasquillarse un arma de los terroristas y repeler los agentes la agresión, los etarras cesaron el tiroteo y huyeron en el mismo coche, en cuyo maletero seguía encerrado su propietario. Abandonaron el automóvil en una calle de Vitoria, donde más tarde fue liberado su dueño.

Aparte de los 68 años y cuatro meses de prisión, el tribunal ha fijado una indemnización a las víctimas de 287.029,67 euros y de 603,76 por daños materiales.