El excomisario general de Seguridad Ciudadana Santiago Cuadro ha dicho que en torno a las 12.45 horas del 11 de marzo informó de que había "indicios" de que el explosivo utilizado en los atentados de Madrid podía ser dinamita y ha negado tajantemente que él mencionara que se trataba de Titadyne.Este testimonio contradice el prestado la pasada semana por el exsubdirector general Operativo de la Policía Pedro Díaz-Pintado quien aseguró ante la comisión que fue Cuadro quién le informó a mediodía del 11-M, cuando se encontraba reunido con la cúpula policial, de que el explosivo utilizado en los atentados era dinamita Titadyne, el habitual de ETA.Cuadro ha explicado que se limitó a decirle que los indicios apuntaban a dinamita reforzada con cordón detonante y que si Díaz-Pintado le repreguntó "¿seguro?, él habría contestado que "seguro no". "Estoy totalmente convencido de que no dije Titadyne, yo dije dinamita. Estoy seguro al cien por cien, de eso no me puede apear nadie. No podría haber dicho otra cosa", ha insistido.Tras afirmar que durante ocho años fue comisario general de Seguridad Ciudadana y aclarar que de él dependían los TEDAX, Cuadro ha insistido en que en la estación de El Pozo, ante la orden de Díaz-Pintado relativa a que le informara de qué clase de explosivos se habían utilizado, comenzó a hablar con los agentes que trabajaban con los explosivos."Por la potencia y los efectos de la deflagración" en la estructura metálica de los vagones y el cráter que se hizo en el suelo, ha explicado que los TEDAX se inclinaron por atribuir una mayor potencia al explosivo que la que tiene la pólvora, y "parece que cobra cuerpo la idea de que es de la familia de la dinamita reforzado con cordón detonante".A las 12.45, sólo indicios de dinamitaEl comisario Cuadro ha insistido en que a las 12.45 horas informó de que aparecieron "indicios de que podría ser una dinamita posiblemente reforzada con cordón detonante", pero aseguró que nunca le puso marca diciendo que se tratase de Titadyne, porque para ello haría falta un proceso analítico. "Eso es lo único que puedo asumir como dado por mí", ha señalado.Después de admitir que las comunicaciones en el lugar de los hechos eran muy deficientes, ha aseverado que él nunca dijo que se tratara de Titadyne y que en la conversación con Díaz-Pintado sólo mencionó que por indicios podría ser dinamita. Preguntado por la versión ofrecida por éste, aseguró que los dos eran profesionales y que por muchas veces que les preguntaran ambos mantendrían sus reproducciones de la conversación que mantuvieron. Tras justificar un posible error por la tensión y las circunstancias del pasado 11 de marzo, ha añadido que el haber concluido en la conversación telefónica con Díaz-Pintado que se trataba de Titadyne o de Goma 2 Eco no habría implicado cerrar una línea de investigación. Ha añadido que identificar indiciariamente un explosivo por sus efectos no significa señalar a un autor. La conversación con Díaz-Pintado fue transmitida por éste a los responsables de la Policía y de la Guardia Civil que estaban reunidos con el entonces secretario de Estado de Seguridad, Ignacio Astarloa, y la mención al Titadyne se consideró, según el subdirector operativo, "la guinda" que avalaba la hipótesis de ETA como autora de la matanza, que el ministro del Interior, Ángel Acebes, mantuvo como única en su comparecencia de la una y media de la tarde del día 11.Furgoneta de Alcalá de HenaresFrancisco Javier Alemán Belizón, agente de la Unidad de Guías Caninos de la Policía que inspeccionó exteriormente la furgoneta utilizada por los terroristas del 11 de marzo, ha contradicho esta mañana el informe del Centro Nacional para la Defensa (CNI) que indicaba que los detonadores estaban a la vista, pues cuando él miró no vio nada sospechoso, ni bulto, ni bolsa, ni detonadores. Eso sí, sólo tuvo una visión parcial desde el parabrisas delantero, ya que las partes laterales y traseras eran opacas.Ante la comisión de investigación sobre el 11-M, ha relatado que esa mañana recibieron por emisora la llamada para acudir a Alcalá de Henares, sin especificar que se trata de un vehículo relacionado con los atentados. Sólo les dijeron que era un vehículo sustraído y que se había encontrado junto a la estación desde donde partieron los trenes atacados. Llevaban dos perros pastor alemán. Uno de los policías se encargó de la inspección ocular exterior, acompañado por su perro, y no vio nada sospechoso, pues sólo recuerda un chaleco reflectante. Ni bulto sospechoso, ni bolsa, ni detonadores. Tampoco vio la cinta, de cuya existencia se enteró por la tarde. Examen negativo de explosivosUna vez forzada la puerta trasera del vehículo, su compañero introdujo al segundo perro, que salió tal y como entró, dando negativo el examen de explosivos. Eso sí, el animal no pasó a la parte delantera del vehículo ya que, al parecer, había una rejilla separadora. En ese sentido, tampoco ve extraño que el perro no detectara los restos de explosivo de la bolsa, que estaba en la zona delantera. Además, el animal había estado toda la mañana haciendo muchas requisas y se trataba de una mínima cantidad de explosivos que, por su cuantía, no desprendía olor suficiente. Según ha explicado, un perro tampoco puede detectar detonadores, que son aparatos electrónicos para los que su olfato no está entrenado. El agente, que en aquella misión iba de paisano como todos los agentes situados dentro del cordón de seguridad, no vio que las puertas delanteras llegaran a abrirse, pues estaba a unos 50 metros de distancia y se fue antes con el perro. Desde que guardó al animal, debieron pasar unos 20 minutos hasta que la furgoneta fue precintada.Más comparecenciasEsta tarde comparecerán el director del Instituto de Estudios sobre conflictos y acción humanitaria, Jesús Núñez Díaz (16.00 horas); el sociólogo Manuel Castells (17.30 horas) y el profesor experto en Historia de las Religiones Antonio Picaza (19.00 horas). El juez Del Olmo no entregará variso documentosEl juez de la Audiencia Nacional Juan del Olmo se ha opuesto a entregar los documentos que le solicitó la comisión parlamentaria del 11-M, a excepción de las declaraciones policiales y judiciales del portero de Alcalá de Henares (Madrid) Luis Garrudo, quien encontró la furgoneta utilizada por los autores de los atentados, al haber testificado ya en el Congreso.En un auto enviado esta mañana al presidente del Congreso, Manuel Marín, el juez explica uno por uno los motivos por los que no puede acceder a las peticiones de documentos hechas por la Comisión y que, en todos los casos, se debe fundamentalmente a que las actuaciones están secretas y el conocimiento de los documentos solicitados pondría en peligro la investigación judicial.Respecto a facilitar los informes recabados al inicio de la investigación abierta el 11 de marzo, tal como sugirió el fiscal general del Estado, del Olmo señala que facilitar ese tipo de información "obligaría a un alzamiento parcial e injustificado en este momento del secreto de las actuaciones".