La exteniente de alcalde de Marbella Isabel García Marcos ha abandonado durante unas horas la prisión de Alhaurín de la Torre (Málaga) para declarar por otro delito urbanístico en el que se encuentra involucrada la anterior corporación municipal. El juez ha tomado declaración a otros cinco antiguos concejales, entre ellos a otro imputado por el caso Malaya , José Jaén, por el denominado caso Magenta , la concesión de una licencia de obra ampliando la edificabilidad prevista en el Plan General de Ordenación Urbana.

El abogado de García Marcos, José Carlos Aguilera, explicó que su defendida fue citada a declarar al formar parte de la comisión de gobierno que aprobó un proyecto "en ejecución" (la licencia fue concedida en el mandato de Julián Muñoz), que contaba con informes jurídicos y técnicos que avalaban su legalidad y apuntaban que la obra se ajustaba al proyecto básico, "por lo que no había más opción que aprobarlo". La licencia en cuestión permitió edificar 20 viviendas en la zona conocida como El Trapiche, donde el planeamiento vigente aceptaba solo cinco.

Aguilera matizó que su defendida no está acusada de delito urbanístico, sino que aparece como imputada provisional por prevaricación.