El exministro de Trabajo Manuel Pimentel ha admitido ser el padre del hijo de Alicia Sánchez-Camacho. El niño, que el 14 de septiembre cumplió siete años, ha sido inscrito en el Registro Civil como Manuel Pimentel Sánchez-Camacho, según informa este viernes el diario 'El Mundo'. Hasta ahora, se pensaba que el vástago de la presidenta del PP catalán, que nació por el método de fecundación in vitro, era fruto de un donante anónimo.

Pimentel reconoció a finales del pasado mes de septiembre que es el padre biológico del hijo que Sánchez-Camacho alumbró hace siete años. El niño ha sido inscrito en el Registro Civil como Manuel Pimentel Sánchez-Camacho. Todo el proceso judicial se ha desarrollado de mutuo acuerdo.

Manuel Pimentel Sánchez-Camacho fue concebido tras un tratatamiento de fecundación in vitro realizado en el Institut Marquès, situado en el barrio de Pedralbes de Barcelona. La presidenta del PPC fue atendida por la doctora Marisa López-Teijón, responsable junto a su exmarido del Institut Marquès, en un proceso "largo y duro".

Él, ministro; ella, directora general

El padre del niño fue ministro de Trabajo y Seguridad Social en el primer Gobierno de José María Aznar. Sánchez-Camacho trabajó en su ministerio como directora general del Instituto Nacional de Seguridad en el Trabajo. Se quedó embarazada con 39 años y dio a luz cinco meses después de cumplir los 40. La actual jefa de filas del PPC aseguró en un principio que el donante era «anónimo», entre otras razones, porque la ley impide facilitar la identidad del padre salvo que medie una demanda o lo reconozca voluntariamente.

Pimentel, de 52 años, está separado de su primera mujer. Ha tenido un contacto permanente y fluido con el niño desde que nació. Durante estos siete años no ha dejado de llamar un solo día para preguntar o hablar con él. Y no pocos han sido los fines de semana que se ha desplazado desde Sevilla y Madrid --reside a caballo de ambas ciudades-- a Barcelona para verle, según informa 'El Mundo'. Pimentel, que abandonó definitivamente la actividad pública en el 2004 por su rechazo a la segunda guerra del Golfo, mantiene una relación estable con la madre de su hijo.

Pimentel es uno de los pocos ministros que ha dimitido en asunción de sus «responsabilidades políticas». Dio el paso en febrero de 2000 al descubrirse que un colaborador suyo, Juan Aycart, tenía una empresa de formación y cobraba subvenciones millonarias del Inem.