Ante la situación creada en la Comunidad de Madrid, el PSOE ha tocado a rebato. En una doble convocatoria que no es habitual, la ejecutiva socialista se reúne esta mañana en Madrid, cuando le correspondía hacerlo el lunes próximo. Por la tarde, celebrará sesión de trabajo el consejo territorial, en el que están presentes los dirigentes de todas las autonomías. El doblete ha generado expectación entre los cuadros consultados, que ayer deshojaban la margarita acerca de los acuerdos que proponga Zapatero. Es probable que la dirección del PSOE dé luz verde a una querella contra los dos traidores.

Aunque en los niveles de mayor responsabilidad en el PSOE se daba por supuesto que se hará una llamada al cierre de filas --"porque si no nos caemos todos"--, alguno apuntaba la remota posibilidad de que José Luis Rodríguez Zapatero dé un puñetazo en la mesa y proceda a remover a quienes desde la dirección federal o regional madrileña no han puesto freno a la presencia en las candidaturas del PSOE de tales personajes. "Nuestro partido ha de dejar claro en todo caso que en este país determinado poder económico está dispuesto a todo", agregaron.