La brigada contra el terrorismo islamista comenzó a investigar el contenido de la tarjeta del teléfono móvil, que apareció en la mochila desactivada en la madrugada del 12 de marzo, a las 10 de la mañana de ese día. Así consta en un informe remitido ayer por la comisaría general de policía científica.

El comisario de esa unidad, Miguel Angel Santano, explicó ante la comisión del 11-M que, desde las 15.32 horas del 12 de marzo, la policía buscaba a un hombre de "rasgos árabes" y a otro de "tez morena" como presuntos autores de los atentados. Esas personas fueron identificadas por los supervivientes.

El jefe superior de policía de Madrid, Miguel Angel Fernández Rancaño, aseguró que el "punto crítico" de la investigación se produjo en la madrugada del 12 de marzo, "cuando se recoge la tarjeta" del móvil. A su juicio, entre la madrugada del 12 al 13 de marzo, "se puede determinar que estamos ante una actividad de carácter integrista".

Este mando confirmó que su brigada siguió a Serhane Abdelmajid, el Tunecino , por integrar una célula de terrorismo islamista. El último seguimiento fue el 5 de marzo, pero la investigación no prosperó. Un juzgado ha archivado el caso, pero Juan del Olmo --que investiga el 11-M-- lo ha reabierto.